Tormenture es un juego pixelado que basa su premisa en ofrecer una experiencia de tensión, combinando una atmósfera escalofriante con un aspecto retro. Ambientado en los años ochenta, comenzaremos a jugar a un cartucho en nuestra consola y empezarán a ocurrir cosas extrañas. Tendrás que apartar la mirada de tu consola y ver qué ocurre a tu alrededor, en tu habitación, modelada de una manera bastante realista.
Cosas extrañas que se veían venir
El cartucho de Tormenture que insertaremos en nuestra consola tiene el típico formato al que nos tenía acostumbrados la gente de Atari. Cuando comenzamos a jugar podremos notar que el entorno alrededor de nosotros en el mundo real comienza a cambiar. Parece que nadie se podría llegar a imaginar una relación entre las misteriosas desapariciones de niños y este videojuego, pero obviamente tiene mucho que ver.
Uno de los aspectos más chulos del juego es que puedes dejar de jugar al cartucho en cualquier momento para centrarte en descubrir qué está ocurriendo a tu alrededor. Esta dualidad atrae mucho al jugador, ya que sentimos la necesidad de ver qué está pasando a cada momento en nuestra habitación.
Comentando cosas sobre la habitación, su aspecto es bastante inmersivo: juegas gran parte del tiempo a oscuras o con muy poca luz, creando una atmósfera más que interesante. A pesar de que existen misterios dentro del juego, el mundo real no se queda atrás, teniendo muchas cosas interesantes para ofrecernos.
Ciertos detalles que te harán recordar viejos tiempos
Hoy en día todo es internet, digital e inmediato; sin embargo, en Tormenture nuestro personaje consultará una libreta, algo que posiblemente la mayoría de los jugadores de hoy día tomarían como impensable. Con los avances y la tecnología, como mucho podemos apuntar ciertas indicaciones o anotaciones en algún editor de texto, sino incluso buscar la solución brindada por otra persona en internet. Pero antes la vida del jugador era así, era ensayo y error, eran apuntes sin demasiado sentido, tenías que estrujarte el cerebro.
El ambiente que se genera alrededor de esta experiencia también es excelente, ya que una simple llovizna puede llegar a ponernos en tensión mientras estamos jugando. No es que podamos apartar la vista de nuestra consola y merodear por toda la casa, pero la sensación de salir del videojuego a un entorno tridimensional es bastante atrayente.
Sin entrar en demasiados destripes, ocurren cosas tanto en el mundo digital como a nuestro alrededor. Gran parte de las veces solo serán pequeños detalles, pero merece la pena explorar un poco para sumergirnos en esa atmósfera que nos brinda Tormenture.
Obviamente estamos ante un juego retro
Lo que más puede chocar a aquellos que quieran probar este juego seguramente sean las capacidades de los 8 bits que tenían los sistemas de entretenimiento de la época. Acostumbrados a un control casi perfecto, cientos de detalles de iluminación y una definición que rivaliza con la vida real, andar trasteando por entornos oscuros semi vacíos puede llegar a ser un problema. Quizás no para los gamers más experimentados, pero para las nuevas generaciones puede ocasionar algo de rechazo.
Sin duda Tormenture es un juego que podríamos definir como «de nicho», ya que va dirigido a un público bastante concreto. La finalidad es bastante típica: conseguir cuatro artefactos y hacer frente a un laberinto. La cuestión es que se rumorea que varios niños han desaparecido mientras jugaban a este juego; esto es una clara alusión a la aversión contra los videojuegos que se tenía en los ochenta, donde eran perseguidos y señalados.
Tal vez este mal viaje suceda por soplar…
Una de las advertencias más incumplidas en la historia de los videojuegos se hace presente en esta aventura. Tras el fallo inicial tendremos que sacar nuestro cartucho, ya que debido a un fallo de lectura nos impide seguir jugando. Si estuviéramos en el mundo real, y en la década de los ochenta, existe una grandísima probabilidad de que ese crío soplase el cartucho antes de volver a insertarlo en su consola.
Mano de santo, funciona como debería funcionar. Lo que nadie te contó en su día es que esto es, posiblemente, una de las cosas más perjudiciales para un cartucho de videojuegos. En la mente de los adolescentes, la conexión fallaba con la consola debido a algún pelo, mota de polvo o similar que impedía la lectura del mismo. Tan solo tienes que soplar un poco y se irá, problema solucionado. Lo que no sabían es que podías malograr tu cartucho, debido a las partículas de saliva que podían corroer el metal de los pines del cartucho.
El simple hecho de sacar el cartucho y volverlo a introducir hacía que los pines entraran en contacto y funcionase correctamente. Soplar no servía para absolutamente nada bueno, si no todo lo contrario. Es más, detrás de los cartuchos de Nintendo 64 se incluía la advertencia de no soplarlos, ni tocarlo con los dedos, ya que esto podría dañar la superficie. Lo que no te dicen es que podrías acabar invocando al mal con tus actos.
Lo paranormal abunda
A pesar de que no podemos decir que en Tormenture haya sobresaltos extremos, sí que se cuece una buena tensión en el ambiente. Desde mensajes tétricos grabados al revés, susurros misteriosos, cajones que se abren y se cierran en tu cuarto y ruidos directos en la puerta del mismo, estos hechos harán que nos mantengamos en tensión. Sin querer entrar en destripes, tenemos muchos easter eggs que desenmascarar a lo largo de nuestra jugada.
Uno de los aspectos más añejos es la forma de jugar, por ejemplo pudiendo llevar solo un objeto con nosotros. Sin embargo, la accesibilidad de los tiempos que corren nos permite ver un mapa que señala dónde está cada uno. La dicotomía entre mundo real y virtual hacen que sea muy disfrutable, y el aspecto visual en ambos planos es bastante interesante.
Conclusión
Tormenture no es un juego para todos los públicos. Sin duda alguna, sus guiños a los juegos de antaño pueden resultar obsoletos para gran parte de los jugadores de hoy en día. Sin embargo, su aspecto 3D recrea fielmente el ambiente que solíamos tener en aquella época. Además sumamos a la receta algún que otro quebradero de cabeza, ya sea por los puzles en sí o por los sobresaltos en el mundo real. Aunque no sea un juego pensado para todos los jugadores, a nadie le haría mal darle una oportunidad.
✔️ PROS:
- Recrea fielmente la jugabilidad de la época.
- Buena atmósfera repleta de suspense.
- El cambio del mundo real al virtual es interesante.
❌ CONTRAS:
- No puedes llevar varios objetos a la vez.
- Algunos puzles pueden hacerte pensar de una manera diferente.
- El aspecto 8 bits puede ser algo duro para los jugadores más jóvenes.
🎮 PLATAFORMAS: PC.