Vivimos en unos años en la industria del videojuego en los que parece que los desarrolladores y distribuidoras que traen el videojuego al público general buscan complejidad dentro de sus productos: grandes historias, profundas tramas, avances e innovaciones en el tema jugable o mecánicas complejas. Todo esto suele tener un fin claro: hacer de sus juegos un artículo al que haya que prestarle una especial atención, donde nos tengamos que sentar y estirar bien las manos para ponernos a jugar «en serio». El ámbito arcade, tan famoso y que tantos buenos ratos dio a la generación de jugadores de los años 80, parece que se ha visto suplido por estos nuevos juegos «hardcore». Pero siempre está la excepción que confirma la regla, y en este caso, esa excepción se llama Mario & Sonic en los Juegos Olímpicos: Río 2016.

Estamos ante otra entrega más de la, ya afianzada en la industria, saga de Mario y Sonic en los Juegos Olímpicos. Cada cuatro años nos llega la entrega de rigor. Y este, por supuesto, no podía ser menos, con los Juegos Olímpicos que se celebran en Río de Janeiro en agosto. Así que nos plantamos delante de los miembros más emblemáticos del universo de Mario, uno de los cabezas de Nintendo, acompañado de los compañeros más reconocibles del héroe de Sega, Sonic.

Mario y Sonic en los Juegos Olimpicos: Rio 2016


Mario & Sonic en los Juegos Olímpicos: Río 2016 es un arcade, como comentábamos antes, de los clásicos: minijuegos rápidos (en su mayoría) con un sistema de control y manejo muy simple. El juego busca eso, la diversión sin muchas más pretensiones, el acceso rápido. Y lo consigue. Desde el inicio están todos los minijuegos (equivalentes a las diferentes disciplinas olímpicas) disponibles para el disfrute tanto en solitario como en compañía de cualquiera que nos quiera acompañar.

El juego cuenta con un total de 14 pruebas distintas: BMX, 100m, Gimnasia, Relevos 4x100m, Triple Salto, Natación, Jabalina, Tiro con arco, Boxeo, Hípica, Tenis de mesa, Fútbol, Rugby a siete y Voley playa. Estos tres últimos son los más destacables y los que más «complejidad» (dentro de la simpleza de los controles) tienen, además de contar con una versión «Desafío», en la cual profundizaremos un poco más adelante. Contamos con varios modos de juego para agradar a todo el que quiera jugar: en el modo «Partida rápida» encontramos dos variaciones: la de juego individual, o la de juego multijugador, ofreciendo ambas los mismos minijuegos, pero con la variación del número de personas que podremos jugar simultáneamente.

Mario y Sonic en los Juegos Olimpicos: Rio 2016

A pesar de que 14 es un buen número en lo referente a la cantidad de pruebas disponibles, la verdad es que se hace algo escaso cuando juegas a las mismas. Esto viene propiciado, sobre todo, por la simpleza de los controles y la similitud entre algunos de los minijuegos. Deportes como los 100m, los relevos o la jabalina son muy similares en el control, pero tenemos otros muy diferentes, tanto en control como en objetivos: en BMX tendremos que sincronizar los saltos con un botón, en tiro con arco deberemos usar la cruceta para intentar acertar al mayor número de dianas posibles y en tenis de mesa haremos un 1 contra 1 tan emocionante como en cualquier Mario Tenis. Al final, deja un sabor agridulce, como si pudieran haber hecho algún juego más, aunque con estos 14 tendremos para un buen rato.

Los controles se han simplificado hasta lo mínimo, habiendo deportes en los que con un solo botón y la cruceta te valga para jugar. Recuerda, en la esencia, a la mecánica que ha seguido toda la vida Blizzard: fácil de aprender, difícil de dominar. Y es que aunque existan los mínimos botones posibles, algunas de las pruebas son complejas cuando ambos jugadores saben jugar. Por ejemplo, el boxeo presenta dos botones para golpear, y uno para cubrirse, pero no basta con eso. Si ajustas el bloqueo al golpe, no recibirás daño y tendrás la oportunidad de devolver el golpe con más potencia. En casi todos los minijuegos te explican las bases, lo sencillo, y corre de parte del jugador asimilarlas y llevarlas al límite para ganar a sus contrincantes en las pruebas.

Mario y Sonic en los Juegos Olimpicos: Rio 2016

Aunque cada prueba cuenta con sus propios objetivos, tres de ellas se podrían considerar las más «avanzadas», tanto a nivel de complejidad como a nivel de mecánicas: Fútbol, Rugby a siete y Voley playa. Estas tres modalidades, conocidas por casi todos, son grupales, y se disfrutan muchísimo en compañía, ni qué decir cuando conoces el deporte en cuestión. Rugby a siete es la primera vez que se ve como deporte oficial en los Juegos y Sega ha querido hacer un especial hincapié en darle el cariño necesario para estar compitiendo por uno de los más divertidos de jugar de entre los 14 minijuegos. Estos tres minijuegos tienen una versión llamada «desafío». En este modo, disponible únicamente para estas pruebas, tendremos unas cajas especiales que harán de la partida algo mucho más caótico de lo normal. Efectos especiales, modificadores de tamaño o de las mecánicas del juego serán algunas de las cosas que harán del modo desafío algo a probar con los amigos si queremos pasar un buen rato.

El modo de competición olímpica no está disponible desde el principio, sino que tendremos que acceder a él después de haber jugado varias veces a las pruebas en modo partida rápida. Así, como si de un tutorial y práctica se tratara, se nos introduce a las mecánicas de cada una de las pruebas de manera que el jugador pueda asimilar los controles y objetivos de la mejor manera: jugando.

Mario y Sonic en los Juegos Olimpicos: Rio 2016

Mario & Sonic en los Juegos Olímpicos: Río 2016 también cuenta con un nuevo modo de juego llamado «Duelo de Héroes». Aquí tendremos que elegir un equipo: o elegimos al equipo «Mario» o al «Sonic». Cuando lo hagamos, competiremos en pruebas al azar con personajes amigos del protagonista que hayamos elegido. Conforme avancemos en las pruebas, y las vayamos ganando (o perdiendo), veremos que los que se queden atrás irán perdiendo participantes, quedando cada vez menos de un equipo para que juegue por su equipo.

Cabe recalcar, para los más competitivos, que pese a ser un juego con unos tintes arcade marcadísimos, no tenemos un modo online propiamente dicho. Lo más parecido que encontraremos será la competición contra el fantasma, donde nos enfrentaremos en las pruebas solitarias a las puntuaciones en el ranking de otras personas del resto del mundo para poder competir con ellas por las mejores puntuaciones.

Esto toma mucho más sentido cuando hablamos de los personajes, diferentes entre sí y con características y particularidades propias que los acercan más al juego de unos u otros en los minijuegos. Hay más de 40 personajes distintos a elegir, siendo casi la mitad desbloqueables, pudiendo escoger también a nuestro mii, y todos ellos tienen el «homónimo» del bando contrario. Si eliges a Mario, tienes también a Sonic. Si eliges a Peach podrás escoger también a Amy. Cada uno, como hemos dicho, con sus particularidades que lo hacen diferentes del resto.

Mario y Sonic en los Juegos Olimpicos: Rio 2016

Como bien indica el nombre del videojuego, tiene la licencia oficial de las olimpiadas y eso queda más que patente a la hora de jugar. El logo de la mascota y de las olimpiadas está presente por todos lados, así como la presencia de las principales sedes de cada deporte, las mismas donde se juegan oficialmente. A nivel gráfico no es que sean la viva imagen, recordemos que es un juego que presenta a las mil maravillas a los personajes de Nintendo y Sega y que estos son cartoon, así que tanto las localizaciones como los gráficos y menús toman este estilo, con colores vivos y alegres.

En lo referente al sonido, a grandes rasgos, defrauda. Si bien es verdad que cada minijuego tiene su propia música, y está bien escogida, toda ella pegadiza y alegre (acorde al estilo del juego), se hace repetitiva en caso de jugar más de cinco minutos al mismo minijuego. Podría parecer que esto no es un problema, pues es un juego de minijuegos en el que la idea es ir cambiando cada poco tiempo de uno al otro, pero con cada punto, cada ronda o cada paso de fase, el minijuego resetea el bucle de música, escuchando casi siempre los mismos acordes, en el mismo orden. Y hay juegos a los que se le suma el que juegas sesiones más o menos largas, como el volley playa. Si te juntas con otros tres amigos y os echáis unos partidos, al final acabarás por quitar el sonido de la televisión cansado de siempre el mismo sonido repitiéndose en cada punto (que en nuestro caso, no duraba más de 5-7 segundos, con lo que imaginad la de veces y con la frecuencia que lo oíamos…).

Mario y Sonic en los Juegos Olimpicos: Rio 2016

En resumen, Mario & Sonic en los Juegos Olímpicos es un juego para echarle un rato con los amigos, para pasar unos momentos divertidos con cuatro mandos. Tiene controles y mecánicas sencillas, pero con cierta profundidad cuando se indaga en ellas. La primera impresión jugable es muy agradable y divertida, pero con el paso de las partidas pierda ese punto novedoso y se quede en un machacabotones que no consigue mucho más que divertirnos en los tiempos muertos con los amigos.

DEJA UNA RESPUESTA

Por favor ingrese su comentario!
Por favor ingrese su nombre aquí

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.