Desde hace unos meses las reseñas de los tomos de la serie de “El monstruo de al lado” (publicado por Norma Editorial), de Robico, es un artículo habitual en la página y el momento en que nos toque hablar de su final está cerca. Ahora repasaremos “El monstruo de al lado 11”, el antepenúltimo tomo de la serie.
En esta ocasión Shizuku intenta seguir con su vida en el instituto como si nada hubiera pasado, como si Haru no hubiera abandonado el instituto tras discutir con ella. Y lo peor no es que él haya abandonado las clases, es que nadie sabe dónde se encuentra ahora.
Esta situación provocará que todo el grupo se vuelque en su búsqueda y en ayudar a Shizuku, sobre todo Yamaken (detalle que puede no hacerle mucha gracia a Haru). Por otro lado, Sasayan empieza a rememorar cosas de su pasado y Natsume comienza a darse cuenta de que sus sentimientos por él pueden haber cambiado ahora que ya no comparten tanto tiempo juntos.
Gracias a los acontecimientos de este tomos hemos podido descubrir otra cara de los protagonistas, una más profunda, que hasta ahora no habíamos podido ver. La faceta deprimida de Shizuku y Sasayan es algo que hasta este momento solo habíamos podido vislumbrar y que ahora podemos ver claramente. La evolución de los sentimientos de Natsume también será algo principal en este tomo, al igual que las reacciones de Sasayan. Además, en este recopilatorio los diálogos y los monólogos internos son más abundantes, ya que las imágenes no muestran con suficiente fidelidad todo lo que pasa por la mente de los protagonistas.
Y como ya sabéis, la autora, Robico, estuvo el mes pasado en el XXIII Salón del Manga de Barcelona. En este evento no solo se dedicó a firmar ejemplares de obra, sino que también presentó su nueva licencia en España («Nuestras pequeñas conversaciones» (“Boku to Kimi no Taisetsu na Hanashi”) cuyo primer tomo ya está publicado) y dio una clase magistral donde enseñó como hacia sus dibujos.
Y después de todo esto… ¡Nos leemos en el próximo tomo!
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