Hasta hace unos años, los juegos de cocina parecían destinados a quedarse recluidos en las listas de juegos de la red social de turno, pero, por suerte, la visión y el trabajo de estudios como Ghost Town Games han conseguido cambiar el panorama. Hace poco más de dos años, los miembros de este equipo tomaron la decisión de crear un título centrado en el modo cooperativo, donde la estrategia, la planificación y la colaboración fueran pilares fundamentales de la jugabilidad y, de todo ello, surgió Overcooked.
El título de cocina que pudimos disfrutar hace dos años no solo demostró lo bien que puede funcionar un juego indie cuando pulsa las teclas adecuadas, si no que ha dejado más de una lección valiosa por el camino que a más de un estudio de desarrollo de títulos AAA no le vendría nada mal aprender. Ahora, dos años después, Ghost Town Games, recupera la formula para refinarla y expandirla para dar forma a Overcooked 2, uno de los juegos multijugador más divertidos del año.
En esencia, Overcooked 2 podría confundirse con una expansión del juego original, ya que la mayor parte de las mecánicas permanecen intactas. Así, la base de la jugabilidad consiste en compartir una cocina junto a un máximo de otros tres cocineros para elaborar todo tipo de recetas mientras hacemos frente a todo tipo de problemas. En teoría, para cocinar una receta solo tendremos que buscar los ingredientes, prepararlos, cortarlos, cocinarlos, emplatarlos y servirlos en el menor tiempo posible para conseguir una propina alta que nos aporte bastantes puntos para conseguir todas las estrellas disponibles en cada nivel.
El problema – o lo bueno – llega cuando preparar y cocinar un plato es la menor de nuestras preocupaciones y, es que, cada escenario cuenta con sus propias trampas y condiciones únicas que complican hasta el extremo el terminar un plato sin que se haya incendiado la mitad de la cocina. Desde niveles en los que la cocina estará separa en dos partes y tendremos que lanzar los platos y los ingredientes de una zona a otra para que las recoja el otro cocinero, hasta instalar la cocina en medio de una carretera de varios carriles obligándonos a esquivar coches mientras llevamos encima sartenes y cacerolas con la comida a medio hacer. Con el paso de las horas, los niveles que tendremos que superar serán cada vez más originales y absurdos obligándonos a cooperar y a coordinarnos cada vez mejor para superarlo con éxito. De hecho, no será extraño cocinar en bases secretas en las que tendremos que pulsar botones para abrir puertas que se encuentran en la otra punta del escenario para que otro cocinero pueda entrar o tener que movernos entre decenas de plataformas que se mueven, se hunden o se queman de vez en cuando. La variedad de situaciones es inmensa e, incluso si se ha jugado a la entrega original Overcooked hace poco, los escenarios o las situaciones no se hacen repetitivas en ningún momento.
Aunque el juego puede completarse de forma individual – controlando a dos personajes de forma simultánea – Overcooked 2 está pensado para disfrutarse con amigos ya sea en modo local o, por primera vez, a través de internet. Todos los niveles pueden completarse con un máximo de cuatro amigos deambulando por la cocina y podemos asegurar que las risas, la tensión y los gritos de desesperación y rabia están a la orden del día. Después de media hora de juego es muy posible que la relación de amistad que tengáis con vuestros amigos se haya fortalecido o destruido por completo. Dependerá de vuestro nivel de estrés.
Como novedad, ahora podremos lanzar los ingredientes a distancia para dejarlos sobre mesas o pasárselos a otro jugador para que los cocine, ahorrando mucho tiempo pero obligando a los jugadores a estar más coordinados que nunca si no quieren que los ingredientes terminen olvidados en una esquina de la cocina.
Junto al modo historia, que podremos completar en unas cuatro o cinco horas dependiendo de nuestro nivel de habilidad, Ghost Town Games ha incluido dos modos más: Arcade y Versus. En el modo Arcade podremos participar en niveles aleatorios del modo historia con el objetivo de conseguir la mayor puntuación posible. Además, la facilidad para pasar de un nivel a otro sin apenas tener que esperar, convierten a este modo de juego en el ideal para pasar las tardes con amigos sin tener que perder tiempo entrando en el modo historia.
Por otro lado, el modo versus nos permite competir en equipos de dos jugadores – local u online – en batallas de cocina en las que tendremos que conseguir más puntos que el equipo rival para alzarnos con la victoria. En el tiempo que llevamos jugando hemos podido ver todo: desde equipos totalmente compenetrados hasta jugadores que se han peleado a voces a través del chat de voz pasando por otros equipos que, entre plato y plato, se dedicaban a quitarnos los ingredientes que estábamos preparando para retrasarnos. En definitiva, el modo versus es un campo de minas terriblemente divertido.
A nivel técnico nos encontramos ante un título que aprovecha casi por completo los modelos, texturas y personajes del juego original y, aunque el margen de mejora es amplío, lo cierto es que el estilo artístico del juego consigue cubrir sin problemas los problemas gráficos de Overcooked 2. Los escenarios son casi más variados que antes trasladándonos, como comentábamos antes, a todo tipo de lugares y situaciones. Cocinaremos en barcos, restaurantes chinos, globos aerostáticos, bases secretas y volcanes por comentar algunos y cada uno de ellos tiene sus propias reglas, obstáculos y trampas con las que tendremos que lidiar, lo que demuestra que el diseño de escenario es aun mejor de lo visto en la primera parte.
Algo hay que destacar es que, al menos en Xbox One, se producen pequeños tirones en momentos muy puntuales de la partida. Es cierto que son pocos y no afectan demasiado al ritmo de las partidas, pero sería muy de agradecer que Ghost Town Games solucionara este problema cuanto antes.
A nivel sonoro nos encontramos con una selección de tema más variada y, sobre todo, alegre que la vista en Overcooked. Desde el instante en el que entremos en el menú principal del juego comprobaremos que los temas algo tristes y melancólicos de la primera parte han sido sustituidos por temas mucho más enérgicos que encajan a la perfección con el espíritu del juego. Además, el juego ha sido completamente traducido al castellano con un cuidado extremo. Mención especial al Pan-Demonium, una perla que quedará gravada en nuestras mentes para siempre.
Conclusión
Overcooked 2 puede definirse como más y mejor. Si os gustó la primera parte, está secuela os encantará. El control se ha refinado, los escenarios son más variados y la inclusión de un modo competitivo online amplia de un plumazo las horas de juego. Si por el contrario no disfrutásteis con la propuesta cooperativa de Ghost Town Games esta secuela tampoco será para vosotros.