El pasado mes llegó “Kageno también quiere disfrutar de la juventud 5”, uno de los shojos más divertidos que Norma Editorial tiene actualmente en publicación. En él, Yuka Kitagawa nos presenta a una protagonista cuya torpeza roza lo surrealista, y que quiere ser una adolescente normal. Pero el mundo no se lo pondrá nada fácil.
Si no conoces el manga o no estás al día, te recomiendo leer las reseñas de los primeros tomos, donde explico sin spoilers de qué va la historia y si es adecuada para ti. Este artículo puede contener datos importantes de la trama hasta el volumen cuatro, por lo que lee bajo tu propia responsabilidad.
Después del viaje a la playa del cuarto tomo, Kageno y Mitsunaga vuelven a tener una cita. Esta vez se van de cena a un lujoso hotel, pero, como siempre, la realidad parece aliarse en contra de la protagonista para chafarle la noche. Una noche que terminará en un (¿posible?) primer beso.
Ya de vuelta a las clases, Kageno se ve enredada por las amigas de Reina, y se enfrenta por primera vez a la presión social que supone tener que cambiar para encajar con el resto. Con el festival cultural de por medio y literalmente un montón de mierda encima, ¿podrá sobrevivir la chica a tanto estrés?
Finalmente, el tercer arco de “Kageno también quiere disfrutar de la juventud 5” despega cuando la protagonista encuentra el anuario de Mitsunaga y ve una foto de él con una joven muy guapa. ¿Acaso será su primer amor? ¿Y seguirán sintiendo algo el uno por el otro? Justo cuando está a punto de dejar pasar el asunto, la susodicha hace su aparición.
Hilarante e inesperado
El manga de Yuki Kitagawa continúa en este volumen con su tónica habitual: la de una chica extremadamente torpe a la que todo parece salirle mal, pero cuyo esfuerzo logra darle la vuelta a las cosas, aunque no sea de la forma que ella espera.
En este tomo veremos las dos facetas a las que a Kageno le cuesta más adaptarse: por un lado la romántica, con una cita que despertará nuevas emociones y que nos hará latir el corazón muy deprisa con una escena en concreto; y la amistosa, en la que la protagonista deberá decidir si mantenerse fiel a sí misma o encajar en el patrón de sus nuevas amigas.
Todo ello presentado a través de situaciones tan surrealistas que invitan a la carcajada continua, con una trama ligera y unos cuantos clichés a los que, sin embargo, la autora le da un toque de frescor humorístico. Y es que nada es igual si le ocurre a Kageno.
Una protagonista conquistadora
En este sentido vemos a una protagonista cada vez más madura y abierta a experimentar nuevas emociones. Su personaje va ganando profundidad a medida que avanza la historia, y combina a la perfección el humor ligero con el pequeño toque de drama de Kageno enfrentándose a sus inseguridades. En este sentido la chica se hace querer muy deprisa; es fácil empatizar con alguien que, a pesar de sus imperfecciones, lucha con todas sus fuerzas para ser feliz.
Los demás personajes empalidecen un poco a su lado. Incluso Mitsunaga, su interés romántico, sigue sin pasar del prototipo de chico guapo, amable y protector que siempre la entiende. Solo su manía de reírse por lo bajinis de ella alivia esa aura de perfección que lo envuelve. Si bien cumple con su función de novio, de momento por sí mismo aporta poco a la trama, ya que solo parece existir para Kageno. Lo mismo ocurre con el resto de un elenco escaso y poco desarrollado. Todos ellos orbitan en torno a su relación con la protagonista, así que espero ir conociendo un poco más de sus personalidades, y que la autora no se limite a utilizarlos para hacer evolucionar a la chica.
Un shojo visualmente diferente
El resto del diseño es clásico del shojo, con poco detalle en los fondos y texto e imagen bastante bien equilibrados.
En definitiva, este manga es una excelente opción si buscas algo ligero, divertido y con toques de romance. Una historia diferente con una protagonista adorable que no tardará en robarte el corazón.