Estrenada una década después de su antecesora, ya está aquí Ready Player Two, la esperada secuela de este blockbuster que dio en la diana por su planteamiento. Publicada en Nova, ha sido traducida por David Tejera Expósito, siempre muy activo en las RRSS, y las galeradas han sido revisadas por el bueno de Antonio Torrubia.
El autor de Ohio
Ernest Cline (Ohio, 1972) es el autor de Ready Player One, el éxito que en 2011 puso a la Ciencia Ficción en primera fila con un desbordante homenaje a la cultura de los videojuegos de la década de 1980, destilando nostalgia en cada página. El libro permaneció más de cien semanas seguidas en las listas de los más vendidos del New York Times y se ha convertido en un título mítico para la literatura de género. A ello ha ayudado, no cabe duda, la adaptación al cine de Steven Spielberg.
Cline, que vive en Austin, Texas, con su familia y una gran colección de videojuegos clásicos, desapareció de las RRSS para afrontar en solitario el reto de continuar esta historia. Él mismo ha asegurado que la secuela cinematográfica ya está en marcha (veremos). Pero, lo cierto es que poco más se ha confirmado. Dado el éxito de su predecesora, poco nos hace dudar que antes o después el cine tendrá su particular versión. Hasta entonces, con el que sí parecen contar es con Tye Sheridan, el protagonista de la primera.
Meted una moneda y dadle al Play. Arranca de nuevo la partida
Días después de ganar la competición ideada por James Halliday, el fundador de OASIS, Wade Watts se encuentra en el piso superior del rascacielos de GSS, Gregarious Simulation Systems, en Columbus, Ohio. Va a empezar su nueva y multimillonaria vida así como su estrenada profesión. Shoto se encuentra en Japón, Hache en Senegal y Samantha Evelyn Cook ha volado a Vancouver para hacer las maletas y despedirse de su abuela; muy pronto volvería. Mientras tanto, Wade Watts se conecta de nuevo a OASIS y aparece en la sala final donde aguardaba el último Huevo de Pascua. Solo que en esta ocasión hay una inscripción que hace que el muchacho se desconecte de inmediato y corra al piso número 13. Allí abrirá una caja fuerte tecleando la combinación que ha visto inscrita en el huevo que acaba de encontrar. Ahí dentro se guarda el ONI, un dispositivo de ultimísima generación que va a revolucionar por completo la sensación de conectarse a OASIS. Ahora, la experiencia va a ser completa y muy adictiva. Es más, existe una limitación de horas de conexión y de intervalo hasta volver a interactuar. Este dato será relevante en la historia.
La búsqueda de los siete fragmentos del alma de la sirena
ONI es una pasada. Te permite revivir situaciones de las vidas de otras personas, ver el mundo a través de sus ojos, oírlo a través de sus oídos, olerlo a través de su nariz, saborearlo a través de su lengua y sentirlo a través de su piel. Se trata de la herramienta de comunicación más potente que los humanos hayan inventado jamás y probablemente sea la última. Podría incluso servir para recabar un pequeño OASIS que incluir en una nave espacial que nos llevara fuera de nuestro sistema solar. Ahí lo dejo.
Con el aparato de marras, nuestro protagonista acaba residiendo en la fortaleza de Halliday, de tal manera que pasan los años y, aunque hace muchas donaciones e inversiones con fines altruistas, se recluye en la soledad de una realidad virtual aumentada. Tan solo su inteligencia artificial Max le acompaña a todas partes. Sus amigos y su mundo real queda cada vez más lejos. ¿No os suena?
Volvemos a tener un acertijo y un marcador de jugadores que ahora está a cero. Una nueva partida acaba de empezar. Solo que, en esta ocasión, utilizando sus privilegios, Wade descubre a Los Cinco Peores de L0, muy similares a los Cinco Mejores que conocimos en la primera novela. Los avatares de L0hengrin, Wukong, Rizzo, Lilith y Kastagir quedan al descubierto para Wade. Son jóvenes humildes que habían recibido ayudas del Programa de Oportunidades para Jóvenes Desfavorecidos de GSS. L0hengrin es realmente Skylar Castillo Adkins, una tejana de 19 años. ¿Qué paradoja, verdad? Veremos su aportación a la trama.
Antes de tener tiempo para responder, L0 levantó ambas manos, me dedicó una sonrisa avergonzada y siguió hablando muy rápido. -Te lo digo con todo el respeto, claro. Porque te admiro, tanto a ti como todo lo que has conseguido. Es que has perdido un poco las formas. Lo que tiene todo el sentido del mundo. Te hiciste rico y famoso de la noche a la mañana! ¿Sabes lo que decía Bill Murray al respecto? «cuando te haces famoso, te pasas un año o dos comportándote como un gilipollas integral. Es inevitable, le pasa a todo el mundo. Y tienes dos años para resolverlo o te quedas así para toda la vida».
¿Qué vas a encontrar en Ready Player Two?
Pues, mucho de Ready Player One. Cuando digo mucho, es mucho. Contracorriente de algunos, he de decir que si bien esta novela no prende la chispa de algo nuevo como su predecesora, sabe utilizar su estela para replicar el modelo de manera bien construida. Esto podría caer en el efecto de un refrito, pero la calidad en la densidad de su contenido hace, a mi juicio, que se garantice el disfrute. Una nueva historia que sirve de disculpa para revisitar una década fantástica y que, además, en sus últimas cincuenta paginas toca la ciencia ficción más hard que ya abriera Matrix en su día.
Si bien la pirotécnica versión cinematográfica me gustó como espectáculo, el libro me enganchó de principio a fin mucho más. Eso es lo que nos ha provocado a la afición de esta franquicia el deseo de una secuela. Continuación, por cierto, que arranca donde concluyó la primera.
Es cierto que os puntualicé en su momento que no es lo mismo haber vivido esa década a que te la cuenten. Pero, reconozco que la experiencia es plena si viviste los 80s. Ese plus no lo tendrán todos los lectores/as. Por lo que a los demás os recomiendo que lo uséis de guía inmersiva en un momento rompedor culturalmente hablando del que aun se bebe mucho hoy en día.
Sea como fuere, volvemos a tener a alguno de los mismos personajes. Bueno, Og Morrow desaparece y Nolan Sorprendo escapa de prisión. No digo qué ocurrirá, obviamente, pero volveremos a contar con un villano, un malo malísimo y giros sorprendentes de la historia.
Pasados unos capítulos, nos embarcaremos en una búsqueda que nos llevará en volandas hasta la página 400. Y nos divertiremos como en la primera búsqueda. Acertijos bien trabajados y una cuenta atrás contrarreloj agónica de la que penden millones de vidas. La túnica de Anorak le dará libertad total a Z, pero necesitará que L0hengrin le ayude a conseguir el primer fragmento, por el cual el heredero tiene que pagar un tributo. Así hasta siete veces en total.
Visita a algunos rincones del imaginario popular excepcionales. Si eres purista de los spoiler, salta a las conclusiones.
La búsqueda de los fragmentos provoca la visita de lugares y planetas que están evocados en multitud de referencias que aún estaban sin tocar en este universo. 
Podría empezar a enumerarlos, pero prefiero, por ejemplo, remarcar el par de capítulos en el cual se hace una parada en la retrospectiva del director de cine, productor y guionista estadounidense John Hughes y la protagonista de La chica de rosa, Molly Ringwald o El Club de los cinco.
Me quedo con las versiones de Prince, de un histrionismo muy… Prince. Pero, ojo, mezclado con Morris Day and The Time. Lo dicho, una locura.
No podía faltar Dungeons & Dragons, Dragones y Mazmorras, y su fuente: el mundo de J.R.R. Tolkien.
En Ready Player Two aparecen un montón de referencias a la trilogía. Si habéis leído El Silmarillion, El señor de los anillos o El Hobbit os ayudará a refrescar toda su terminología. Si no, tranquis, aquí nos dan un curso acelerado.
No podían faltar los videojuegos clásicos y sus consolas. 
En esta segunda entrega haremos parada en Sega Ninja, el arcade de 1985 que luego se lanzó para Master System como The Ninja. En el libro se explica que originalmente se llamó Ninja Princess.
Conclusiones
Ready Player Two replica el planteamiento de su antecesora. El mundo está enganchado a la realidad virtual que ofrece OASIS y ahora se le da una vuelta de tuerca que pondrá en peligro a la propia humanidad. Quizá exista un debate a propósito de ello entre los protagonistas, pero este dura poco. La moneda está echada y una nueva partida da comienzo. La diversión está asegurada entre películas y música de los 80.
Karen Underwood tendrá una presencia e importancia relevante con sus caballeros que la rondaron toda la vida. Su figura guiará a los protagonistas, viejos y nuevos, hacia un nuevo Huevo de Pascua.
La diversión está por tanto asegurada entre planeta y planeta de imaginación superlativa mientras se intenta salvar la vida en la Tierra real. El que se enganchó hace años, podrá prolongar su imaginario.
¿Tendemos a un mundo de Corporaciones? ¿Un 0,0001% de la población esclaviza al resto? ¿Soñamos mientras vivimos o nuestra vida es un sueño? ¿Cabrá nuestro cerebro en una unidad de almacenamiento? ¿Gobernarán en el futuro las IAs? ¿Hay cabida para el amor en todo lo anterior? Ya veis, preguntas filosóficas para un texto palomitero y confeccionado para esperar la versión cinematográfica. Una mezcolanza que quizá algún purista descarte. Puedo entenderlo. Pero, si buscas diversión pura y dura, dadle al play.
Antes de despedirme…
…permitidme un par de recomendaciones multimedia.
El propio autor firma una playlist en Spotify con todas las canciones que nos recomienda y que aparecen en el libro. De tal manera que, si queréis que la experiencia sea completa, no tenéis más que pulsar aquí.
Por otro lado, Wil Wheaton vuelve a poner su voz para el audiolibro de la versión original en inglés. La primera colaboración se mantuvo en los primeros puestos durante cinco meses, por lo que la han repetido. A falta de versión en español, aquí os dejo el link de la versión original.
Espero haberos dado razones suficientes para que nadie le dé al botón rojo, por que… nos vemos en OASIS.
