Aquí tenéis una nueva emisión de La Nave cargada de contenidos. Os contaremos todo acerca de la tercera entrega de la trilogía de los Godos, de Pedro Santamaría. En Campos de gloria el destino de Roma se juega a una sola batalla . O, quizá, su destino ya está escrito (min. 08:15). También, encontraréis tres estrenos literarios que han entrado en el radar (min. 21:05), incluyendo dos novelas gráficas (min. 26:52). Por último, compartimos el lanzamiento de la novela El último amanecer, conclusión de la trilogía Escena Final (min. 30:45).
Noveno título de Pedro Santamaría
Este santanderino nacido en 1975 se licenció en derecho por la Universidad de Canterbury, Inglaterra, país donde ha vivido, estudiado y trabajado desde los catorce años. Después de haber viajado a Taiwan, donde fue profesor de inglés y castellano, decidió volver a su tierra natal para establecerse definitivamente. De hecho, le encontramos como traductor de alguna de las novelas del catálogo de Ediciones Pàmies.
En su faceta de escritor ha firmado nueve novelas, todas ellas publicadas en Pàmies: Okela (2011), El águila y la Lambda (2012), Peña Amaya (2014), Rebeldes (2015), que le valió el premio Hislibris a Mejor Autor Español de Novela Histórica, Godos (2017) y Al servicio del Imperio (2018). Después vendrían la fabulosa El ateniense (2019) y El saqueo de Roma (2020).
Roma, año 450 d.C. Atila desafía al Imperio Romano.
El primer capítulo es un ejemplo excelente de cómo ponernos en situación a los lectores. Asistimos a una descripción perfecta del traslado de la capital del Imperio a Rávena, ya que Roma se sume en un pozo negro lamiendo las heridas del pasado. Los chacales la rodean dando zarpazos que poco a poco la debilitan. Gala Placidia Augusta recuerda su lujoso pasado, su primer marido, Ataúlfo, y a Teodosio, el hijo que tuvo con él.
Después, vino otro marido, Constancio, que le dio dos hijos: Flavio Placidio Valentiniano y Justa Grata Honoria. De hecho, el varón de estos dos últimos es el actual emperador. La noble romana, por tanto, hace repaso de su vida soñando con alcanzar el cielo donde encontrarse con su primer hijo, que falleció muy joven, y su primer marido, que fue su verdadero amor. Pero, ella tampoco descarta que acabe en el infierno dado que ha sido una madre y una regidora severa, como manda defenderse en tiempos tan difíciles. Una infidelidad de la joven Honoria desembocará en un ardid de peligrosas consecuencias.
Aquí no podían faltar los godos, ya que recordad que esta novela es la tercera entrega se la serie, si bien se pueden leer perfectamente a vuestro aire. Los godos han establecido un pequeño reino en torno a la ciudad de Tolosa. En Aquitania se asientan los nietos de Alarico e hijos de Teodoredo, rey de los godos: Eurico (el pequeño), Turismundo (el primogénito), Teodorico y Clotilde. Atila se ha hecho con Oriente y les va a tocar decidir si enfrentarse solos, aliarse al rey de los hunos o ayudar a la Roma que pedirá su alianza, a pesar de las cicatrices del pasado.
Flavio Aecio, respetado general en jefe de las tropas de Occidente, sabe que la cuenta atrás ha comenzado para que Atila asome por la parte de Europa que le falta por conquistar. Occidente es débil y está solo: África ha caído en manos de los vándalos mientras suevos y bagaudas campan a sus anchas por Hispania.
Mientras tanto, en Rávena, la corte imperial del joven y voluble Valentiniano III es un nido de serpientes, conspiraciones y traiciones. Por tanto, Flavio Aecio, de alguna manera, está solo para defender lo que resta del antaño glorioso imperio. Junto a su hijo adoptado, Meroveo, rey de los francos, Optica, el jefe de la guardia personal y Artorio ,un britano aliado, tendrá que vérselas para luchar por sus principios y su fe ciega en Roma.
Jacinto, el eunuco, llevará un mensaje a Atila procedente de la joven e infiel Honoria. Marcelo, el traductor, nos desvelará el contenido. Ya tenemos montado el lío.
La batalla de los Campos Cataláunicos
El clímax de esta novela es una de las batallas más importantes y determinantes de la historia; la batalla de Châlons o batalla de Locus Mauriacus. Esta batalla fue el último gran enfrentamiento del ejército del Imperio romano de Occidente, elevando a Flavio Aecio al Olimpo de los generales. El lugar donde tuvo lugar la batalla fue en algún descampado en la margen izquierda del río Marne, cerca de la ciudad de Châlons-en-Champagne, en el Norte francés, aunque se desconoce la ubicación exacta.
La segunda parte de la novela describe esos dos días de batalla del año 451 d.C. que enfrentó a ejércitos de todos los pueblos de Europa. Unos, aliados con el despiadado Atila; otros, con el águila de Roma. Sin duda es el corazón de este título y auténtico fuerte de Campos de gloria. El desarrollo de los personajes, más o menos esbozados, dan paso a los lugares y las escenas de lucha. En esta ocasión, prima la acción, la estrategia y el destino de Occidente.
Lo que pudo ser y no fue
Este título de fácil lectura nos ofrece una excelente oportunidad de viajar al siglo V d.C cuando el continente está a punto de hacerse añicos. Asistir a lo que pudo ser y no fue. Si bien, el desenlace estaba escrito años atrás. Novela fuerte, descriptiva, plagada de personajes que entran y salen. Un recorrido a todos los puntos cardinales, con cometa en el cielo incluido y destino final de los godos en Hispania.
Se incluyen magníficos mapas, factura de Calderón Studio, al igual que la portada, que nos ayudarán a leer mejor los movimientos descritos en el texto. También una Cronología de los auténticos hechos acontecidos y una Nota del Autor donde nos explica el germen y construcción de la novela.
Pedro Santamaría no defrauda con esta trabajada, adictiva y entretenida novela histórica que te lleva hasta la última página en volandas, describiéndonos vívidamente el final de un importante capítulo en la historia de nuestro continente.
Lee el primer capítulo aquí.
