A finales de abril, Square Enix tomó la decisión de cancelar o reducir el desarrollo de varios de sus títulos triple A para consolas y PC. Esta medida, que supondría una pérdida de millones de euros, fue parte de un cambio integral en la estrategia operativa de la compañía.
Y es que, el informe financiero correspondiente al año fiscal 2024, mostró una disminución del 70% en los beneficios de la empresa en comparación con el año anterior. Esta caída se atribuye en parte a las pérdidas producidas por el abandono de varios proyectos clave.
Ante esto, la empresa ha adoptado un enfoque estratégico renovado que prioriza la calidad sobre la cantidad, el desarrollo multiplataforma, y la reorganización interna de sus equipos. Además, busca aprovechar mejor las ventas de su catálogo existente y captar a más jugadores de PC.
«Una revisión proyecto por proyecto de la viabilidad del desarrollo continuado determinó que estos esfuerzos concretos eran incompatibles con el enfoque revisado de la Compañía para el desarrollo de juegos en alta definición, que refleja objetivos como el desarrollo multiplataforma y el refuerzo de las capacidades de desarrollo internas», explicó Square Enix en su informe.
Cabe destacar que el reciente lanzamiento de Final Fantasy VII Rebirth, exclusivo para PS5, ha recibido elogios tanto de la crítica como del público. Sin embargo, sus ventas no han alcanzado las cifras de Final Fantasy VII Remake, que se lanzó durante la pandemia y en un contexto con un mayor número de consolas en el mercado. A pesar de esto, Final Fantasy VII Rebirth se posiciona como uno de los juegos más vendidos en 2024.
