Con el fin de promocionar su nuevo libro, “Face: One Square Foot of Skin”, un tomo creativo de no ficción sobre las formas en que la sociedad responde a las mujeres a medida que envejecen, la actriz convertida en autora y cineasta Justine Bateman llamó a su amiga Carrie-Anne Moss para moderar un debate al respecto.
En la charla, Bateman fue directa sobre las críticas recibidas por su rostro envejecido de forma natural («tuve que deshacerme de esta idea de que mi rostro era algo que era horrible y debería arreglarse«, comentó) mientras que la discreta Moss habló sobre qué opina de la vida como actriz mayor de 40 años en Hollywood.
Carrie-Anne Moss: «Miraba a estas actrices francesas y europeas y simplemente tenían algo en ellas… se sentían tan confiadas en su propia piel»
«A los 40 todo cambió«, afirmó Moss, que ahora tiene 53 años y se prepara para el lanzamiento de “Matrix 4”, en la que retoma su papel de Trinity. «No creía en eso porque no concibo simplemente saltar a un sistema de pensamiento con el que realmente no estoy de acuerdo. Pero literalmente el día después de mi 40 cumpleaños, estaba leyendo un guion que me había llegado y estaba hablando con mi agente al respecto. Ella dijo: ‘Oh, no, no, no, no es ese papel [para el que estás leyendo], es la abuela. Puede que esté exagerando un poco, pero sucedió de la noche a la mañana. Pasé de ser una niña a la madre más allá de la madre«.
Moss aseguró que fue una transición difícil de procesar, en parte porque los actores masculinos evitan esa misma trayectoria. Moss comentó que nunca quiso permanecer en el negocio si sentía que debía cambiar todo sobre sí misma para permanecer en él. «No sientes que has envejecido mucho y de repente te ves a ti misma en la pantalla«. Es «un poco brutal» presenciar el proceso. «Miraba a estas actrices francesas y europeas y simplemente tenían algo en ellas… se sentían tan confiadas en su propia piel. No podía esperar a ser eso. Me esfuerzo por ello. No es fácil estar en este negocio. Hay mucha presión externa«.
Moss elogió a Bateman por escribir su libro, que sigue a otro publicado en 2018 que examina Hollywood y la cultura popular, “Fame: The Hijacking of Reality”. Para este nuevo libro, Bateman, de 55 años, comentó que se vio obligada a analizar más profundamente las expectativas injustas que se depositan en las mujeres, en particular en las que aparecen a la vista pública como ella, a medida que envejecen. «Me parece psicótico que hayamos pasado normalizado cualquier conversación sobre que deberíamos estar cortándonos la cara [en referencia a las operaciones estéticas]», aseguró. «¡Tiempo muerto, tiempo muerto! Esto no es un hecho. Esta es una idea que podemos admitir o no. Yo digo, al diablo con eso«.
Y debido a que se ha resistido a la práctica comúnmente aceptada de pasar por el quirófano para parecer más joven, muchos críticos han recurrido a los foros de mensajes para criticar su apariencia. Bateman rechazó que vaya a elegir la cirugía, y llamó a observarse una misma para determinar los factores desencadenantes de este tipo de ideas y superar todas las inseguridades que la llevaron a valorar alguna vez esta opción.
Fuente: Hollywood Reporter.