Exitosa, polifacética, adelantada a su tiempo… Agatha Christie rompió moldes y creó otros que aún perduran.
Recientemente, a uno de los periodos de medidas más duras frente a la pandemia —cierre de la comunidad autónoma, cierre perimetral del municipio, cierre total de la hostelería, cierre de los comercios y servicios no esenciales…— se sumó un temporal de frío y lluvia. Contribuyó a encerrarnos aún más en casa.
Un día, durante un rato a primera hora de la tarde, salió el sol.
Caminaba por un muelle desierto a esa hora cuando vi, a lo lejos, a una mujer mayor. Sentada en una silla de ruedas, aprovechaba el calor y la luz para leer al aire libre.
Cuando llegué a su altura me fijé en el libro que estaba leyendo: era una vieja y amarilleada edición de bolsillo de una novela de Agatha Christie.
De todos los encierros —a los que sumaba, en su caso, el de estar atada a una silla de ruedas— la liberaba durante un rato la ficción detectivesca de la reina de ese género.
«El primer intento de Agatha Christie por escribir una novela policiaca tuvo lugar en plena guerra, un hecho de especial relevancia si tenemos en cuenta que, dadas las circunstancias de la época, escribir una novela estaba lejos de ser prioridad para ella (…) La farmacia, sin embargo, la incitaba a pensar en asesinatos misteriosos…»
Como hiciera antes con otro grande del género detectivesco, Arthur Conan Doyle, Caamaño ofrece a los lectores una biografía exhaustiva y profusamente documentada. Algo que, en el caso de la ampliamente estudiada vida de la autora británica —quien dejó escrita su propia autobiografía, para ser publicada tras su muerte— no tiene mucho de investigación de fuentes primarias y sí de selección y compilación de lo mucho publicado sobre la trayectoria vital y literaria de Christie.
El resultado es un ameno y bien estructurado volumen de seiscientas páginas. En ellas, los avatares vitales y profesionales de la novelista se entreveran con los de la época que le tocó vivir. Una fórmula que hace que el texto, trufado de anécdotas y curiosidades, no resulte nunca pesado. Tras ejercer de biógrafo del Barón Rojo, Houdini y Conan Doyle, Caamaño demuestra que conoce bien cómo presentar la información de manera que enganche al lector (aunque, por algunos detalles, me ha parecido notar cierta laxitud en el proceso de corrección y revisión)
«…nunca entendió —o no quiso entender— que era imposible convertirse en una escritora de éxito y, a la vez, vivir como una ciudadana corriente. La vida de los famosos (o de aquellos que ya gozaban de cierta fama, como era su caso) era considerada por la prensa como algo de su propiedad, así que su carácter, entorno y acciones suscitaban permanentes (y ácidas) especulaciones.»
El libro se estructura en tres partes, correspondientes a otras tantas etapas de la vida de Christie, siguiendo un orden cronológico: Agatha Miller, la niña que jugaba con amigos invisibles • Agatha Christie, la joven que nunca pretendió ser escritora • Agatha Mallowan, la mujer que cenó con la reina de Inglaterra.
Cada una de ellas comprende varios capítulos, divididos a su vez en epígrafes y Notas del autor.
Una organización clara y ordenada que hace fluido el proceso de lectura.
Completan el libro un arbol genealógico de Christie y tres apéndices:
Uno, el más extenso, dedicado a los venenos, tan presentes siempre en sus relatos. Otro, acerca de las reglas de oro de la novela detectivesca y policiaca. Y otro en el que se recogen sus obras completas y sus principales personajes.
«Christie quería que sus personajes permaneciesen en una nebulosa, porque aunque cada uno de ellos poseía características individuales, su intención era demostrar y retratar arquetipos humanos válidos en cualquier circunstancia geográfica y en cualquier época de la historia.»
Encuadernado en rústica, el libro cuenta con una bonita ilustración de cubierta creada a partir de una fotografía coloreada de la juventud de Christie. Para los títulos se emplean unas fuentes vistosas y evocadoras de su época. El resultado es moderno y clásico a un tiempo.
Multitud de fotografías e ilustraciones en blanco y negro se intercalan en el texto, repartiéndose a lo largo de sus más de seiscientas páginas. Además, cuenta con dieciséis páginas centrales en papel satinado donde se reproducen ilustraciones a todo color, correspondientes a cubiertas de libros, portadas de revistas y carteles de teatro.
El formato del libro es austero y funcional, y se maneja y lee con facilidad.
Eduardo Caamaño (Río de Janeiro, 1972), es economista y especialista en creación literaria por la Universidad Camilo José Cela.
Seducido por la historia desde muy niño se convirtió en un gran aficionado a los libros castrenses. Acabó acumulando una pequeña biblioteca personal que suma más de mil títulos, casi todos relacionados con historia militar de los siglos XIX y XX.
Un día decidió escribir sobre la vida del Barón Rojo, un placentero proyecto personal que se convirtió en una obsesión. Para ello, dedicó cinco años de estudio e investigación reuniendo un sinfín de documentos, libros y copias de archivos provenientes de diversos países. Un proceso que acabó culminando con la publicación del libro más completo sobre el Barón Rojo publicado en España y América Latina: Manfred von Richthofen, el Barón Rojo (2014)
Tras la biografía de Richthofen, decidió realizar una inmersión en la época dorada de la magia. Eligió como hilo conductor la vida y trayectoria del gran Houdini. El resultado de ese proyecto fue el trabajo más exahustivo sobre el mago escapista en nuestro idioma: Houdini (2016)
Luego llegó el turno de la vida y la obra de sir Arthur Conan Doyle. Sin duda uno de los escritores más populares del siglo XX, de él escribió una biografía completa y detallada: Arthur Conan Doyle. La biografía definitiva del creador de Sherlock Holmes (2018)