El cáncer sigue siendo una de las principales causas de muerte en todo el mundo. Los investigadores buscan constantemente nuevas terapias con actividad anticancerígena mejorada, menos efectos secundarios y costos más bajos. En los últimos años, ha crecido el interés por los agentes bacterianos como terapias contra el cáncer, debido a la capacidad de algunas bacterias para crecer selectivamente dentro de tumores hipóxicos, es decir, estas células no reciben un suministro rico de oxígeno.
Pero las terapias bacterianas contra el cáncer tienden a centrarse en la idea de las bacterias como portadoras de fármacos y utilizan técnicas científicas avanzadas y costosas como la ingeniería genética, la bioingeniería sintética y la nanotecnología. Esto hace que sea importante identificar bacterias que sean naturalmente efectivas y específicas de tumores, eliminando así la necesidad de emplear tecnologías avanzadas para mejorar sus propiedades anticancerígenas.
«Logramos aislar e identificar tres tipos de bacterias de los tejidos del cáncer de colon, Proteus mirabilis, que hemos denominado A-gyo; fotosintética Rhodopseudomonas palustris, que hemos denominado UN-gyo; y una bacteria compleja que consta de A-gyo y UN-gyo, a la que llamamos AUN. Este consorcio de bacterias, cuando se inyecta en los tumores, muestra un alto efecto antitumoral«.
Durante años, los científicos han sabido que algunas especies de bacterias crecen naturalmente dentro de los tumores. Hasta ahora, los estudios sobre estas bacterias, denominadas bacterias intratumorales, se han centrado en su papel en el desarrollo del cáncer o en sus efectos sobre otras terapias contra el cáncer, como su capacidad para reducir los efectos adversos de la quimioterapia, etc. El uso de bacterias intratumorales como agentes terapéuticos contra el cáncer es un área de investigación poco explorada.
Recientemente, un equipo de investigación, dirigido por el profesor asociado Eijiro Miyako, del Instituto Avanzado de Ciencia y Tecnología de Japón (JAIST), reveló que las bacterias intratumorales que están asociadas con las bacterias fotosintéticas púrpuras naturales muestran una fuerte eficacia anticancerígena. Sus hallazgos han sido publicados en Advanced Science.
Estas bacterias intratumorales pueden prosperar en tumores hipóxicos y activar el sistema inmunitario
Al explicar su investigación, el Dr. Miyako comenta que, «logramos aislar e identificar tres tipos de bacterias de los tejidos del cáncer de colon, Proteus mirabilis, que hemos denominado A-gyo; fotosintética Rhodopseudomonas palustris, que hemos denominado UN-gyo; y una bacteria compleja que consta de A-gyo y UN-gyo, a la que llamamos AUN. Este consorcio de bacterias, cuando se inyecta en los tumores, muestra un alto efecto antitumoral«.
Los investigadores inyectaron las tres bacterias, A-gyo, UN-gyo y AUN en varios modelos de cáncer en ratones. Descubrieron que estas bacterias intratumorales pueden prosperar en ambientes de tumores hipóxicos y activar el sistema inmunitario para matar las células tumorales.
Esencialmente, la asociación entre A-gyo y UN-gyo fotosintético en forma de AUN provoca fuertes respuestas anticancerígenas en modelos de ratón con cáncer colorrectal, cáncer de pulmón metastásico y cáncer de mama extenso resistente a los medicamentos. De hecho, los ratones que fueron tratados con estas bacterias mostraron tasas de supervivencia significativamente más prolongadas. La eficacia anticancerígena de estas bacterias se encontró incluso en modelos de ratones que fueron tratados con una sola dosis.
Potencial como sonda de diagnóstico específico de tumores
Otro resultado del estudio es la importante fluorescencia del infrarrojo cercano de AUN en los tumores, lo que indica su potencial como sonda de diagnóstico específico de tumores. Los investigadores también realizaron una variedad de pruebas y ensayos para demostrar que AUN tiene poco efecto en el tejido vivo, es decir, es biocompatible.
«Las terapias anticancerígenas avanzadas empleadas convencionalmente son extremadamente costosas«, comenta el Dr. Miyako. «Las bacterias anticancerígenas evaluadas en este estudio se pueden cultivar fácilmente en grandes cantidades a bajo costo en procesos simples, sostenibles y bajos en carbono. Esto sería un gran impulso para la accesibilidad del tratamiento del cáncer en todo el mundo«.
Este estudio es el primero de su tipo y abre las puertas para futuras investigaciones en el campo de las bacterias intratumorales como terapias contra el cáncer.
Fuente: Advanced Science.