Broken Sword: Shadow of the Templars – Análisis

Actualmente, cuando pensamos en juegos con gran peso en el ámbito narrativo, nos viene a la mente producciones de Telltale Games con juegos como The Walking Dead o el emocionante Life is Strange de Dontnod Entertainment. Sin embargo, antes de evolucionar a este punto las verdaderas estrellas eran las entregas de Lucas Arts con Monkey Island o Revolution Software con Broken Sword, un clásico que ha vuelto a salir de la tumba para demostrar por qué fue y se le sigue considerando como uno de los grandes juegos del género y de la clásica jugabilidad del point and click.

Hacía muchos años que la saga estaba desaparecida hasta que un día la desarrolladora decidió volver por todo lo alto anunciando dos nuevos lanzamientos. Las aventuras de George Stobbart y Nico Collard no habían terminado y era el mejor momento para anunciar tanto una nueva aventura como un regreso  renovado de su primer éxito que les dio reconocimiento. De este modo, tenemos entre nuestras manos Shadow of the Templars, un regreso de su primera aventura bastante mejorado. 

Dicha entrega vuelve con un refrescante lavado de cara, jugabilidad adaptada a consolas de sobremesa y la opción de visualizar los gráficos originales con un solo click. Vamos a adentrarnos en los orígenes y descubrir si la nostalgia ha jugado en contra de esta reconocida saga de la que ya podemos adelantaros que sus luces brillan más que sus sombras. Sin duda nos encontramos ante uno de los reencuentros para los jugadores de los noventa que está a la altura y que nos deja con ganas de mucho más.

Un resplandor y hace boom

Pocos turistas tienen tan mala suerte como George Stobbart que decide tomarse unas vacaciones en la romántica París y acaba presenciando un asesinato. A su lado, que te retrasen tu vuelo, tus maletas se pierdan o te llueva en tu lugar de destino, no parece tan negativo después de todo. Nuestro protagonista que intenta disfrutar de un café ve como un payaso hace acto de presencia en el local y provoca una explosión que acaba con la vida de un hombre con gabardina que estaba dentro del lugar. De este modo, nuestro querido Stobbart y la periodista Nico Collard que aparece en escena para investigar lo ocurrido, se ven envueltos en una intrigante trama de asesinatos y secretos que deberán sacar a la luz antes de que sea demasiado tarde.

Con una duración que puede llegar en una primera partida a las diez horas, el juego se mantiene fiel al original al no añadir más localizaciones ni escenas extras a su historia, algo que podemos entender de una remasterización sencilla. Sin embargo, no entendemos por qué eliminaron todo el contenido adicional que agregaron en posteriores versiones, donde añadieron secciones con Nico y puzles más complejos. Esta debió ser la versión elegida para la remasterización, pues daba mayor profundidad, cantidad de horas de juego y más peso a la coprotagonista, que salvo en el final parece anclada a un asiento de su apartamento, dejando todo el peso de la investigación en George.

Un lavado de cara que no rompe con las cinemáticas

Uno de los apartados donde más vemos el cambio es en el apartado gráfico, que ha sido totalmente remodelado. En esta edición han redibujado todos los escenarios y personajes y los han optimizado a 4K, aprovechando además la ocasión para corregir algunos fallos de continuidad que tenía el original. Incluso si no jugaste el juego en su momento, el cambio es notorio y podemos apreciarlo dándole a un botón que nos cambia de una versión a otra en un momento.

El clásico tenía mucho encanto, pero el rediseño le aporta aún más al dotar a los personajes de mayor expresividad, detalle e iluminación. Resulta bastante curiosa esta versión con respecto al primero, pues el cambio es muy notorio y hemos disfrutado mucho comparando cada escenario con el original. Algunos lugares se vuelven más acogedores o tenebrosos en esta edición gracias al gran trabajo añadido y ahora las escenas de gameplay ya casan perfectamente con las cinemáticas.

Los fans de la saga van a disfrutar mucho de esta versión y seguramente, como nosotros, van a querer comparar cada escenario y personaje a cada rato. Se agradece esta opción ya no solo para los más nostálgicos, sino porque nos ofrece dos versiones en uno y además actúa como un homenaje que ya quisiéramos que implementaran en más ediciones mejoradas. Si bien hemos visto esta opción en juegos como la colección remasterizada de los primeros Tomb Raider, habríamos agradecido esto también en otros juegos como el remaster de Final Fantasy X.

La cabra, la cabra, la mala de la cabra

En cuanto a su apartado jugable, no encontramos ningún tipo de añadido, pues respeta la jugabilidad íntegra que tenía el original. Nos encontramos ante las mismas mecánicas de conversación con personajes, exploración de los escenarios y resolución de puzzles. Si bien con las futuras entregas, los acertijos se van complicando un poco más, no podemos dejar de tener en cuenta la época de lanzamiento de este juego y lo complicado que se podía volver a veces.

La resolución de escenarios no siempre se solventa usando la lógica y es que regresar a este juego nos los ha recordado en varias situaciones. Reencontrarnos en el escenario con aquella cabra malhumorada en la que muchos jugadores perdieron la paciencia al no saber cómo avanzar, nos ha traído recuerdos. Estos juegos nacieron antes de la llegada de Internet y atascarse era algo muy habitual, provocando quebraderos de cabeza pero al mismo tiempo siendo memorables. Actualmente, tenemos la solución de todos los juegos a un simple click y ha simplificado y ahorrado la reparación de muchos mandos y teclados a su paso.

Los juegos de la saga Broken Sword son pausados y en donde el ensayo y el error son su principal baza y escuchar la música cuando hemos dado con la tecla correcta sigue siendo tan satisfactorio como en su día. Son entregas de otros tiempos que siguen siendo igual de disfrutables pese a tener un ritmo más tranquilo y creemos que ha sido una gran decisión retomarlas de cara al futuro juego que están preparando.

No hay George sin Tomás Rubio ni Nico sin Esther

Cuando se anunció el regreso de la primera entrega de Broken Sword, muchos fans se preguntaban si llegaría con el doblaje original. Existen personajes unidos a una voz y es el caso de George Stobbart para Tomás Rubio, actor de doblaje que ha tenido una larga trayectoria y que brilla con mucha fuerza en este rol. Su tono desenfadado, irónico y serio le da mucha personalidad al protagonista y muchos extrañamos su voz en las últimas entregas oficiales. Por otro lado, ensalzamos también la voz de Esther Rodríguez con Nico Collard que con su encantador acento francés otorga a su protagonista un carácter indómito, amable y muy divertido.

En cuanto al apartado sonoro, Revolution ha reutilizado la banda sonora original que pese a su antigüedad se ha mantenido con una calidad notable. De hecho, tanto la música como el doblaje se escuchan muy bien, no se nota el paso del tiempo en las grabaciones y perfectamente podría pasar como un trabajo nuevo para aquel no conozca el trabajo original.

En cuanto a añadidos nuevos, está la opción de poner subtítulos a nuestro gusto, pudiendo elegir varios factores a nuestro gusto. Si bien debemos resaltar que en estos hemos encontrado algún que otro fallo pequeño que fácilmente se puede corregir con una pequeña actualización. Además, también nos permite elegir otros elementos como activar o desactivar marcadores de ayuda o incluso ofrecernos pistas si nos quedamos bloqueados en el camino. Todo esto es opcional y siempre es de agradecer, pues permite al jugador disfrutar de la aventura a su gusto.

Conclusiones

Como hemos mencionado antes, Broken Sword : Shadow of the Templars es una remasterización con más luces que sombras. Sus mejoras gráficas, su adaptabilidad a consolas y la opción de poder de disfrutar al original con un solo click, hacen de esta edición la mejor que se ha sacado del juego hasta el momento. Es un imprescindible para los amantes de los juegos narrativos y tanto si eres fan como un nuevo jugador, esta aventura te va a encantar y es una perfecta carta de presentación de cara a la nueva entrega que el estudio está preparando.

En cuanto a sus sombras, encontramos algunos fallos en los subtítulos y un recorte de contenido de otras versiones anteriores. Sin duda habría sido la edición definitiva de contar con el metraje agregado a otras versiones lanzadas anteriormente.