Si conoces la exitosa saga el lado explosivo de Jude, compuesta por «El lado explosivo de Jude», «El lado peligroso de Jude» y «El lado irresistible de Jude»; conoces a Nicole Williams, la autora de «Casi imposible«, publicada el pasado noviembre, con una portada preciosa por la editorial Plataforma Neo.
Nicole Williams, es madre de una niña y una gran esposa. Vive en Washington, aunque cada vez que puede, sale a buscar aventuras con su familia viajando a cualquier lugar exótico. Empezó a escribir porque es algo que le apasiona junto con la romántica juvenil, es su género preferido, ya que cree en el amor verdadero, en las almas gemelas y en los finales felices.
Personalmente no he tenido el placer de conocer a Jude, por lo que no puedo comparar sus obras. Pero si he conocido a Jade y su enternecedora historia de la que os vengo a hablar aquí.
Jade, es responsable, inteligente, amante de los libros y vegana. Este es su último verano libre antes de entrar en la universidad y lo único que le falta por experimentar antes de empezar su nueva etapa, es ser una chica normal.
Jade, vive entre bambalinas y amplificadores con su madre, cantante y guitarrista principal de las Shrinking Violets, un grupo de rock innovador compuesto por mujeres con ganas de comerse el mundo.
Julie, es todo lo opuesto a su madre. Es organizada, estricta, socialmente correcta y aparentemente perfecta. Está encantada de tener a su sobrina en casa y ha preparado un montón de planes para pasar más tiempo juntas y conocerse. Lo que Jade no sabe es que su tía podía llegar a ser insufrible. Ha llenado la despensa de verduras y tofu, ha remodelado la habitación de invitados para ella, ha organizado cenas y salidas para todo el verano, y lo peor de todo, no quiere dejar a Jade ni un momento a solas.
La joven, que está acostumbrada a ser libre y hacer lo que quiere, para poder escapar un poco de su tía, decide aceptar un puesto de trabajo desesperado en el quiosco de la piscina municipal como vendedora de helados.
Es aquí donde entra en juego Quentin, un atractivo socorrista, que resulta ser un verdadero problema para Jade. Quentin desde un primer momento empieza a poner a Jade de los nervios con burlas y miradas socarronas, hasta que una tarde después de un día duro de trabajo y a base de mucho ingenio con indirectas, Quentin consigue por fin que Jade acepte salir una noche con él.
Jade no sabe cómo hacerlo, ya que su tía se horrorizaría con el simple hecho de que saliera a la calle sola de noche, así que haciendo algo que no está en su carácter y que no ha hecho nunca, miente a su tía para poder salir a hurtadillas con Quentin, su nuevo amigo.
A partir de esa noche, se harán inseparables, y Jade experimentará en su propia piel lo que es ser normal: conocer amigos de verdad, salir a divertirse, ir a fiestas, hacer planes a largo plazo, hasta tendrá tiempo de echarse alguna que otra enemiga y más de un problema. Pero, sobre todo, tendrá tiempo de sentir que se está enamorando por primera vez, ni más ni menos que del chico más guapo del barrio, aunque esto no sea lo más indicado para ninguno de los dos.
«Casi imposible» es una lectura ligera y amena que te sacará una sonrisa de vez en cuando, mientras esconde un secreto que no desvelan hasta el mismísimo final.
Lo realmente bonito de la historia es como las apariencias de Jade y Quentin engañan. Y es que una primera impresión no es siempre la acertada. Son personajes que dan por completo la vuelta a su vida. Juegan a ser libres cuando están solos, pero en realidad no lo son tanto cuando vuelven a la realidad. Deberán aprender a enfrentar sus problemas y buscar una salida para que permanecer juntos, no sea casi imposible.
Si os gustan las historias románticas, ligeras y entretenidas os recomiendo esta novela.
Puedes leer aquí el primer capítulo.