Concript el survival horror perfecto y sin pretensiones.

La Primera Guerra Mundial fue tan cruda y terrorífica que no hace falta mucho para hacernos pasarlo mal en modo pixel-art con Concript.

Podríamos abrir el debate sobre donde está la línea que separa lo clásico, lo moderno y lo innovador, pero en este caso vamos a hablar sobre Concript. El juego que cogiendo un poco de algunos juegos clásicos y modernos y añadiéndole algo tan terrorífico como la Primera Guerra Mundial ha sabido meternos el miedo en el cuerpo muchas veces durante su historia. No les hace falta introducir tramas complejas, tampoco ningún tipo de virus o maldición. Aquí, nos están contando la crudeza de vivir en las trincheras. No saber si cada día sería tu último día o el de tus seres queridos. 

Concript es un viaje a la nostalgia de los juegos clásicos survival horror. Tendremos nuestros clásicos backtracking, nuestra gestión de inventario y nuestras salas espaciales para guardado. ¿Os suena esto de algo? Pues sí, está claro que Jordan Mochi de Catchweight Studio ha jugado a los clásicos juegos como MS1 de PSX o, al clásico Resident Evil 1.  

Una historia demasiado «real»

En este juego encarnaremos a un soldado francés durante la Primera Guerra Mundial. Estamos en la ciudad de Verdún, y tendremos que navegar por trincheras retorcidas, buscar suministros limitados y resolver complejos rompecabezas, todo esto mientras luchamos por la supervivencia en medio de uno de los conflicto más brutales y horrendos de la humanidad. Pasaremos miedo, angustia y desesperación, sobre todo a la hora de hacer malabares para poder meter en nuestra mochila todo lo que nos sea útil. 

Como ya contamos, no hacen falta zombis ni monstruos cuando la crudeza de la Primera Guerra Mundial queda tan bien retratada. Nos enfrentaremos a soldados enemigos, trampas, ratas hambrientas e incluso al clima más despiadado.

Su jugabilidad es tan clásica como moderna.

Podríamos pensar al leer entre líneas las palabras Resident Evil 1 que se trata de un juego modo tanque, pero no. En este juego podremos equiparnos muchas armas y modificarlas. Incluso podremos colocar bombas por sus caminos laberínticos y beneficiarnos de las infecciones que pueden causar los cadáveres y ratas para propagar enfermedades entre las filas enemigas. Podemos girar por el suelo para sortear disparos y bombas al más puro estilo Elden Ring. Podrás golpear cuerpo a cuerpo con cualquier arma que encuentres como palos, bates, palas etc. Si te quedas sin balas, puedes golpear incluso con dicha arma. Armas que, por cierto, tendremos que amartillar después de cada disparo. Con el riesgo de encasquillarse, lo que me recuerda al gran Red Dead redemption. 

Lo más importante que debes saber, camarada, es que las trincheras y el resto de localizaciones, tanto en superficie como subterráneas, se han diseñado como intrincados laberintos perfectos con puzles, rompecabezas y búsquedas de llaves diseñados para perderse y en los que cualquier esquina será buena para llevarte un tiro. Los soldados alemanes aprovechan las zonas sin alambres de espino para realizar asaltos y hay pasillos bloqueados por derrumbes provocados por la artillería enemiga.

Si hablamos de su ambientación, resulta especialmente impactante escuchar constantemente disparos y explosiones que hacen temblar la pantalla, el detalle de hacer un juego totalmente en plano cenital ayuda mucho en su composición artística estilo pixel-art. Incluso escuchamos gritos acordes con la situación del momento. La ausencia de música en muchas ocasiones también es algo aterrador. Escuchar los pasos y susurros de los alemanes que andan en la oscuridad, es la única forma de identificarlos cuando tu linterna se ha quedado sin pilas.

Nuestra opinión como camarada sobre Concript.

Tras todo esto se encuentra Jordan Mochi, jefe de la empresa Catchweight Studio, una compañía que se estrena en el mundo de los videojuegos con este survival horror. Concript es un juego sobresaliente que intenta traer a la actualidad los survival horror clásicos mientras ahonda en una narrativa más seria y meditada, resolviéndolo con falta de finura en ocasiones, pero siempre con ideas interesantes.

El juego ha conseguido robarme más de 20 horas de diversión y sufrimiento a partes iguales. No negaré que en ocasiones la frustración casi me puede. Pero no es igual morir repetidas veces a manos de un soldado alemán experto que, por culpa del típico jefe monstruoso. Esto ayuda a no sacarte de la inmersión que busca tener la historia.

Está claro que es una pequeña joyita que tenemos que tener en cuenta a partir de ahora. Siempre que queramos abstraernos y recordar los juegos survival horror más clásicos de nuestra infancia, aquí os recomendaremos volver a esta joya.