Acompaña a Cole en su descenso a los infiernos en El Departamento de la Verdad 2
La espera se ha hecho larga pero, por fin, Norma Editorial ha traído a las estanterías el segundo número de El Departamento de la Verdad. Este segundo número, bautizado como El Departamento de la Verdad 2: La Ciudad sobre la Colina, no solo continúa la historia justo donde la dejó el primer tomo, si no que amplía el misticismo, las preguntas y las dudas sobre el funcionamiento de un mundo que parece tener mucho por contar.
El viaje de Cole y Hawk
Al final de El Departamento de la Verdad 1: El Fin del Mundo, tanto Cole como los lectores descubríamos que el departamento trabaja para evitar que todos los bulos y fake news se hagan realidad y cambien por completo nuestro mundo mientras que el grupo ultra secreto Sombrero Negro trabaja para conseguir justo lo contrario.
Sin embargo, eso no significa que El Departamento de la Verdad esté formado por un grupo de personas intachables: todo lo contrario. Los agentes del departamento secuestran y matan a personas inocentes cuyo único crimen ha sido creer una mentira, y Cole tiene que decidir si está dispuesto a pasar por alto este gran inconveniente.
Mientras toma la decisión, El Departamento de la Verdad 2: La Ciudad sobre la Colina nos plantea un viaje a los infiernos en el que Cole acompañará a Hawk – un agente del departamento con muchos años de experiencia a sus espaldas – mientras éste le explica cómo funciona real del mundo en el que viven.
Charlando hasta el final
Desde el primer momento queda patente que este segundo volumen se inspira en La Divina Comedia y, por tanto, estamos ante una historia repleta de diálogos entre ambos personajes en los que el dibujo y el diálogo nos mandan mensajes contradictorios.
El dialogo entre Hawk y Cole es claro y directo, y muchas de las preguntas que nos hemos hecho como lectores quedan respondidas a lo largo de las páginas – también tendremos muchas nuevas preguntas para las que tendremos que seguir esperando una respuesta -. Sin embargo, el dibujo busca matizar o contradecir las revelaciones de los personajes para generarnos dudas y no saber si estamos ante una revelación real o solo ante una mentira más. Ese es el juego en el que James Tynion IV y Martin Simmonds nos han ido introduciendo desde el principio y en El Departamento de la Verdad 2 la jugada les ha salido tremendamente bien.
Como decimos, todo el tomo centra sus esfuerzos en mantener la atención del lector en la conversación entre ambos personajes dejando a un lado cualquier truco o efecto visual con el que rellenar páginas mientras los diálogos se detienen durante unas páginas. En El Departamento de la Verdad 2 la conversación no se detiene, y cada diálogo puede ser crucial para entender el potencial de todo lo que está por venir.
Un premio para Simmonds
El guion de El Departamento de la Verdad está cuidado hasta el detalle, pero el trabajo de Simmonds al dibujo es simplemente magistral. Al igual que ocurre en el primer volumen, el artista ha optado por un estilo impresionista muy marcado en el que destacan, sobre todo, los elementos oscuros y muy poco definidos que buscan confundir lo real con lo irreal.
Durante toda la lectura estaremos acompañados de una sensación de inquietud e irrealidad provocada por los dibujos que acompañan a la obra. Además, todo el cómic está repleto de escenas que recuerdan a los clásicos documentos clasificados de las películas de espías, algo que encaja a la perfección con la conversación que están teniendo los protagonistas.
Conclusiones de la review de El Departamento de la Verdad 2: La Ciudad sobre la Colina
Al final de nuestra reseña del primer número nos preguntábamos si los autores serían capaces de mantener el nivel de calidad en los números siguientes. Ahora ya lo sabemos: se han superado.
El Departamento de la Verdad 2: La Ciudad sobre la Colina no solo mantiene el ritmo y las sorpresas que vimos en el primero, si no que sabe cómo generar nuevas preguntas para mantenernos enganchados a un mundo extraño en el que parece que nadie dice la verdad.
Ahora solo queda esperar al tercer número de una serie que lo tiene todo para ganarse un hueco en el recuerdo de todos los lectores.