Jöel Dicker (Suiza, 1985) es uno de esos autores fenómeno, unos superventas que se mantienen meses en las listas de ventas y recomendados. Saltó a la fama en 2013 con «La verdad sobre el caso Harry Quebert» (Alfaguara), ganadora del Premio Goncourt des Lycéens, el Gran Premio de Novela de la Academia Francesa y el Premio Lire a la mejor novela en lengua francesa, entre otros galardones. Todo un éxito de público y crítica que le permitió publicar «Los últimos días de nuestros padres» (2014), «El libro de los Baltimore» (2016) y «La desaparición de Stephanie Mailer» (2018). Ahora llega «El enigma de la habitación 622», editada por Alfaguara el próximo 3 de junio, apenas una semana después de su salida en su mercado original, el francés.
El argumento.
Una noche de diciembre, un cadáver yace en el suelo de la habitación 622 del Palace de Verbier, un hotel de lujo en los Alpes suizos. La investigación policial no llegará nunca a término y el paso del tiempo hará que muchos olviden lo sucedido. Años más tarde, el escritor Joël Dicker llega a ese mismo hotel para recuperarse de una ruptura sentimental. No se imagina que terminará investigando el viejo crimen, y no lo hará solo: Scarlett, la bella huésped y aspirante a novelista de la habitación contigua, lo acompañará en la búsqueda mientras intenta aprender también las claves para escribir un buen libro.
¿Qué sucedió aquella noche en el Palace de Verbier? Es la gran pregunta de este thriller diabólico, construido con la precisión de un reloj suizo. Joël Dicker nos lleva finalmente a su país natal para narrarnos una investigación policial en la que se mezclan un triángulo amoroso, juegos de poder, traiciones y envidias en una Suiza no tan tranquila, donde la verdad es muy distinta a todo lo que hayamos imaginado.
«El enigma de la habitación 622» apunta a ser uno de los best sellers del año, con el lanzamiento a tiempo para la temporada estival y siendo, quizás, uno de los principales impulsores de las ventas en librerías en estos inciertos tiempos de Covid-19.
En un juego metaliterario, Dicker se convierte en un personaje de su propia novela, intentando hilar una investigación que unirá presente y pasado, muy en la línea de sus obras anteriores. El libro, de 624 páginas, cuenta con la traducción de María Teresa Gallego Urrutia y Amaya García Gallego. «El enigma de la habitación 622» apunta a ser uno de los best sellers del año, con el lanzamiento a tiempo para la temporada estival y quizás uno de los principales impulsores de las ventas en librerías en estos inciertos tiempos de Covid-19.