El destino y la muerte siempre van de la mano, pero también lo hacen la voluntad y la vida. El legado de las Dryden es una novela en la que el destino y la voluntad echan una fiera batalla por el poder, la razón y la esperanza; una guerra en la que la vida y la muerte pasan a ser algo más que dos caras de la misma moneda. La novela de Cristina Murillo Muela está disponible de la mano de Roomie Ediciones.
Para Ariadne Dryden, una Caronte con una pesada tradición familiar a sus espaldas, su vida estaba en las calles empedradas de Stirling, no en las sombras y las catacumbas. Pero cuando su hermana Olivia roba la Guadaña del Manzano, Ariadne se verá en la encrucijada de buscarla en las Ciudades Subterráneas con el objetivo de detener el declive de la humanidad.
Murillo se pasa toda la historia jugando con contrastes: enemigos naturales y amigos por las circunstancias, palabras envenenadas y puñaladas amables. Se pasa tanto tiempo creando estos saltos de blanco y negro, de conocimiento formado por mentiras y batallas cubiertas de pureza, que al final todo se convierte en un registro de color que va mucho más allá del gris.
El legado de las Dryden se basa en la vida de Ariadne y Olivia, dos hermanas tan opuestas como fuerte es el amor que se profesan. Otra cosa es la capacidad de ambas de tener algo de amor propio. Y ya sabemos lo que una autoestima convertida en polvo y una familia desestructurada y rota hasta las migajas puede llevar a hacer a un alma desgraciada: a liarla bien grande. Las argucias que hacen que todo el entramado funcione se me hicieron un poco simples, sí, y habría agradecido un poco más de contexto al respecto. Había momentos en los que sentía que las grandes amenazas y advertencias eran un poco como «¡qué viene el coco!». Pero donde esta novela brilla por encima de todo es en los personajes.
A través de mil y un detalles que funcionan como el puntillismo en un cuadro de Anna Boch, Murillo logra crear unos personajes pulidos, cálidos, bravos y, en más de una ocasión, con la capacidad destructiva de una bola de demolición. Y el mismo tacto.
Valores como la comunicación, la sinceridad, el valor, el amor y el compañerismo se reflejan en la novela desde distintas perspectivas aprovechando que los personajes son tan dispares entre sí. Todo esto crea un mayor peso y respaldo en los personajes, más que en la trama.Una aventura que vivir entre los claroscuros del sueño y la pesadilla, del amor y el odio, y la esperanza de resurgir del polvo y las cenizas.