Cuando Wasteland Workshop llegó a Fallout 4 hace unos meses, comentábamos que ese contenido descargable centraba todo su contenido en ofrecer a los usuarios una mayor variedad de elementos, trampas y objetos de decoración para los asentamientos, aportando un plus de variedad a todos aquellos jugadores que siguen pasando horas construyendo sus propias fortalezas.
Parece que en Bethesda han pensado que el camino a seguir con los DLCs del juego debe ser el seguir ampliando esa oferta de contenidos y opciones en los asentamientos, ya que este Contraptions Workshop que lleva unos días disponibles busca dar una vuelta de tuerca en cuanto a libertad y complejidad a la hora de dar forma a nuestras ideas.
A diferencia de Wasteland Workshop, Contraptions Workshop no se limita a aumentar la oferta de elementos disponibles, qué también lo hace, sino que ha incluido un sistema de creación de sistemas complejos en los que son los propios usuarios los que deben dedicarse a descubrir qué pueden hacer con estas nuevas opciones. La mejor forma de describir lo que ofrece este DLC es compararlo con la complejidad de los sistemas de reacción en cadena con los que cuenta Minecraft, y que han permitido dar forma a todo tipo de genialidades como calculadoras científicas totalmente funcionales o a emuladores con los que jugar a otros juegos dentro del propio Minecraft.
La esencia de Contraptions es similar a esa faceta de Minecraft. Aquí lo que tendremos serán matrices lógicas y circuitos de conmutación de tipo que podremos conectar entre sí para que se produzca una reacción en cadena que termine generando algo complejo. Por ejemplo, en nuestra partida empezamos a probar la forma de hacer explotar unos fuegos artificiales mediante unos interruptores que se iban activando conforme una bola que colocamos en una cinta automática iba moviéndose por encima de ellos. Durante el tiempo que hemos pasado probando el DLC hemos descubierto que, con un poco de práctica y paciencia, se puede incluso generar melodías propias gracias a unos generadores de sonido que podemos activar y desactivar para crear todo tipo de composiciones. También podremos modificar el funcionamiento de los ascensores o crear complejos sistemas de autodestrucción.
Esto es solo uno de los miles de ejemplos que pueden llevarse a cabo y que, a día de hoy, la gente ya está compartiendo en Youtube y que permite hacerse una idea del gran potencial de esta herramienta siempre y cuando tengamos mucho tiempo, imaginación y ganas de dar forma a nuestras ideas. Lo que sí hay que tener en cuenta es que, a diferencia de los añadidos vistos en anteriores DLCs, aquí no tendremos claro cómo debemos hacer funcionar cada una de las piezas, por lo que tocará pasar un tiempo probando y experimentando por nuestra cuenta antes de dar forma a algo que funcione.
Para activar y desactivar los diversos mecanismos que iremos colocando, tendremos acceso a un ordenador en el que aparecerá un listado de todos los elementos con los que podemos interactuar, siendo muy fácil e intuitivo realizar pruebas o cambios en un sistema complejo al poder activar o desactivar un interruptor sin tener que movernos de ese PC.
Aunque la principal novedad de Contraptions es la inclusión de todo el sistema de interconexiones comentado hasta ahora, el DLC también añade nuevas armaduras, recursos y elementos decorativos para los asentamientos, aunque sin duda quedan en un segundo plano respecto al añadido principal.
Conclusión
Contraptions Workshop consigue darle una vuelta de tuerca a la mecánica de juego en los asentamientos, aunque vuelve a limitarse a añadir novedades en ese ámbito. Los usuarios que ya disfrutaron de lo que ofrece esta característica de Fallout 4 y volvieron a engancharse con Wasteland Workshop tienen aquí el DLC perfecto para pasar horas y horas creando sus propias máquinas, pero todos aquellos que busquen algo similar a la expansión de Far Habor tendrán que seguir esperando.