GhostwireTokyo

Hemos jugado a Ghostwire: Tokyo para Steam, una aventura de Shinji Mikami y Tango Gameworks, creadores de The Evil Within.

Mentiríamos si no decimos que, pese a Elden Ring, Ghostwire: Tokyo es uno de los favoritos a hacerse con el premio GOTY de este año. Uno de los títulos más esperados de 2022 que a nuestro parecer ha cumplido con creces con las espectativas. 

En cuanto al género, podríamos decir que Ghostwire: Tokyo no se centra en ninguno en concreto. Es una mezcla de conceptos de acción, aventura, terror y exploración que se desarrolla en el barrio de Shibuya, Japón.

El juego toca temas muy concretos como el espiritismo, la asunción de la pérdida y la responsabilidad familiar, características muy comunes en las tradiciones asiáticas.

Ghostwire: Tokyo está disponible para PlayStation 5 y PC a través de Steam.

Un juego inmaculado con una historia mejorable

Ghostwire: Tokyo nos cuenta la historia de Akito, un joven al borde de la muerte que es poseído por un ente llamado KK. Mientras tanto, la ciudad de Tokio está siendo invadida por entes malignos a la vez que ocurren fenómenos paranormales por todas partes. Vemos como la población de la ciudad nipona ha desaparecido a causa de una misteriosa niebla que embriaga el ambiente.

La misión de Akito se centrará en salvar a su hermana Mari y derrotar a Jania, el misterioso antagonista que ha convertido su ciudad en un escenario fúnebre y post apocalíptico.

La trama juega constantemente con el misterio ¿Quién es Jania y por qué está haciendo todo esto?, ¿quién es realmente KK? Y lo mas importante, ¿cuál es el pasado de Akito y por qué lo eligen a él para tal cometido?

Aunque es una idea simple, Ghostwire: Tokyo tiene un toque de originalidad que lo hace único. Combina de forma muy acertada el folklore japonés como Yokais o Tengus (demonios), puertas Torii y otras criaturas míticas.

Pese a la innovación y el misterio, la trama de Ghostwire: Tokyo está algo desaprovechada. La narrativa puede llegar a decepcionarnos conforme avanzamos en la historia aunque, eso sí, se mitiga un poco con algunos personajes que irán apareciendo y que están muy bien construidos.

Ghostwire: Tokyo cuenta con un amplio abanico de misiones secundarias que mejoran con creces la experiencia de juego

Lo primero que tenemos que decir con respecto a las misiones secundarias es que sin duda son mucho más satisfactorias que la trama principal. Tocan distintos temas como el pasado de KK o leyendas sobre criaturas mitológicas japonesas. También tendremos que completar misiones con pequeñas tramas emotivas con espíritus de por medio, ayudándolos a encontrar el camino al más allá y purificando sus almas.

Las misiones secundarias nos han encantado porque hemos podido conocer con todo lujo de detalles como es la vida en Tokio (con encargos que nos llevarán a situaciones que nos mostrarán hábitos cotidianos del día a día en Japón) y todas las tradiciones y seres mitológicos de la cultura nipona.

Mientras recorremos las calles no pararemos de encontrarnos con objetos espectrales que tendremos que recoger para obtener dinero. Este dinero servirá para gastarlo en supermercados regentados por Nekomatas. Además nos servirá para adquirir cargas para nuestros poderes.

También nos toparemos con espíritus que habrá que «recolectar» para transferir mediante cabinas telefónicas (sí, cabinas telefónicas) a cambio de dinero y experiencia. Esta experiencia será necesaria para mejorar las habilidades de Akito. Además, los callejones esconden estatuas a las que debemos rezar para aumentar nuestros poderes.

Ghostwire: Tokyo también cuenta con un conjunto de habilidades que se centran principalmente en el desarrollo de las mejoras de movilidad, de combate o de equipamiento.

ghostwire tokyo

Tokio como nunca antes lo habíamos visto

Lo que más nos ha sorprendido es la ciudad de Tokio y su excelentísima ambientación. Moverse por el mundo que nos propone Ghostwire: Tokyo es un placer.

Unreal Engine 4 da vida a una recreación de Shibuya espectacular, con todo lujo de detalles y con unos gráficos inmaculados.

Un mundo abierto increíble donde tendremos que purificar de enemigos los distintos santuarios para disipar la niebla y poder avanzar por el inmenso mapa de Shibuya y conocer todos sus secretos, esto funciona al mismo modo que las famosas atalayas de Assassin’s Creed.

El Ray Tracing y el DLSS (implementando en casi todos los juegos de nueva generación) marcan la diferencia, sacándole muchísimo partido a las tarjetas gráficas Nvidia RTX de la serie 3000 y a las AMD Radeon RX de la serie 6000.

Lo anterior, en conjunto con una buena configuración de video, hacen de Ghostwire: Tokio el juego con las exigencias gráficas más altas hasta la fecha, con los escenarios más realistas que hemos jugado. Una maravilla visual para los jugadores.

Destacamos también su potente juego de luces y sombras hechas a la perfección. Casi todo el juego transcurre de noche, por lo que matizar este apartado era muy importante para que el juego no se viera oscuro como pasa en otros títulos a los que finalmente hay que subirle el brillo para poder disfrutarlo.

GhostWire-Tokyo

La jugabilidad, con una perspectiva en primera persona de nuestro protagonista, es muy buena y fluida. Nos ha recordado a otros juegos como Thief, Dying Light o Mirror’s Edge.

La interfaz es simple y sencilla, con los parámetros justos para no atosigar la experiencia visual.

Por último, Ghostwire: Tokyo nos regala una BSO espectacular, con tintes acordes a cada momento del juego. En las situaciones más tensas sonará una melodía que nos tendrá en vilo, atentos a cada esquina para no sobresaltarnos del susto. Por otro lado, cuando estemos paseando por la ciudad, o en lo más alto de un edificio, sonará una música más relajante. Una experiencia totalmente inmersiva que disfrutaremos aún más si jugamos con cascos.

¿Recomendamos Ghostwire: Tokyo?

Aunque hemos disfrutado mucho del juego de Shinji Mikami (alrededor de las 50 horas para conseguir todos los coleccionables), Ghostwire: Tokyo no es un título para todo el mundo. 

Ocurre como con Death Stranding, un juego que cuenta casi por igual con el mismo número de seguidores como de detractores.

Ghostwire: Tokyo es un juego para quien lo busque, para jugadores que sepan a lo que van a jugar. Un título que veremos con frecuencia en tiendas como GAME en los artículos de segunda mano, vendidos por jugadores que lo compraron con otra idea.

Aun así a nosotros nos ha parecido un gran juego con muchas horas de diversión y tensión.

Lo mejor y lo peor

Desde Fantasymundo, lo que más nos ha gustado ha sido lo elaboradas que están las misiones secundarias, el acercamiento a la cultura japonesa y la potencia gráfica que nos brinda.

Lo menos llamativo quizás radique en la trama principal como hemos dicho con anterioridad (que está poco desarrollada) y quizás también en la dificultad, ya que el juego realmente no supone ningún reto para completarlo.

Antonio Cabilla
Redactor, editor y director de la sección de videojuegos. También garabateo en la sección de cómic/manga.

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