Una de las últimas novedades de la editorial Norma ha sido el primer volumen del shôjo La Blancanieves pelirroja (Akagami no Shirayuki-hime), de Sorata Akiduki. Esta historia ya era conocida por parte del público, como yo, por su anime de dos temporadas. Por eso no he podido resistirme a darle una oportunidad a este manga ahora que ha llegado a España.
El primer volumen de esta serie nos presenta a Shirayuki, una joven que se ve obligada a abandonar su país, Tanbarun, porque el heredero al trono se ha encaprichado de ella por su pelo pelirrojo. Esto puede parecer una tontería, pero Shirayuki conoce las locuras del príncipe y lo último que quiere es acabar como su amante, por lo que se corta el pelo y huye a escondidas.
La Blancanieves pelirroja es una historia bonita, divertida y bastante entretenida. La autora consigue que nos situemos pronto en el mundo ficticio que ha creado y que conozcamos y nos enamoremos de los personajes desde el primer instante. Además, en el manga también se juega con las identidades de los personajes y con los secretos sobre el pasado de los protagonistas que harán de esta lectura una mayor delicia.
En cuanto al dibujo, a pesar de ser el que solemos ver en mangas de este género shôjo no me puede gustar más. Se resalta los diálogos por encima del dibujo en casi todas las páginas, pero en las que predomina en dibujo se puede ver perfectamente los gestos y sentimientos de los protagonistas en sus rasgos.
Y por si esto fuera poco, este primer tomo incluye la historia corta de Los colores de las estaciones en agosto. Esta es una breve historieta, que no tiene nada que ver con la principal, y que nos relata un amor de juventud al estilo de los mangas clásicos.
La Blancanieves pelirroja tiene una edición en rústica con sobrecubierta a color que cubre una portada en cartoné decorada en blanco y azul.
La serie lleva publicados en Japón 22 tomos. Aquí, por ahora, solo nos ha llegado el primero, pero seguramente en los próximos meses podamos disfrutar del resto de esta historia.