Tras el exitoso El sótano (The Cellar, 2014), la colección CrossBooks ha publicado este año La cabaña (The Cabin, 2016) acompañada de ingentes dosis de thriller e inocencia perdida. Un libro que, apoyado en varios clichés, busca atraparnos en medio de una investigación tras los dramáticos acontecimientos de lo que se aventuraba como un divertido fin de semana de verano para un grupo de jóvenes. La traducción de este texto plagado de diálogos ha corrido a cargo de Isabel Murillo.
Natascha Preston es una escritora inglesa que ha mantenido simultáneamente dos de sus novelas en la lista de los libros más vendidos de The New York Times. Empezó a escribir en Wattpad en 2010, plataforma en la que obtuvo un extraordinario éxito, tanto de seguidores como de lecturas completadas. Sus novelas de suspense cargadas de tensión se popularizaron gracias al boca-oreja de los lectores y actualmente es un referente para los jóvenes escritores de thriller. Quedan pendientes de ver la luz en nuestro país sus novelas You Will Be Mine (2018) y Awake (2015).
Inglaterra, es viernes 7 de agosto y Mackenzie Keaton marcha de fin de semana a una cabaña con sus amigos Aaron, Courtney Young, Megan Hydock, Kyle y Josh. Los padres de Josh y Blake Harper (que también se une a la excursión) son los propietarios de esta cabaña y todos piensan sólo en pasarlo de vicio, como jóvenes sin ataduras que están a punto de cumplir veinte años. Ya desde el viernes corre el alcohol de manera desenfrenada mientras descubren el lugar y preparan la fiesta. El desconocido y oscuro Blake pronto conectará con Mackenzie y entre ellos se establecerá una química que se irá desarrollando a lo largo de la lectura. Esta primera jornada nos permitirá intuir y entrever que hay secretos del pasado que les acompañan desde que un par de amigas sufrieron una situación muy violenta, Tilly Moss y Giana Beaucoup. Otra excursión que acabó en accidente.
Este fin de semana se ve truncado por un brutal asesinato. Es a partir de este momento cuando una nube de sospecha se cierne sobre todos los protagonistas y no va a desaparecer en todo el libro.
Se creen invencibles. Piensan que pueden hacer y decir lo que les venga en gana. Creen que no hay consecuencias. No me han dejado otra opción. Ha llegado la hora de que paguen por sus pecados.
El libro, narrado en primera persona por Mackenzie, incorporará nuevos personajes secundarios. Entre ellos, el peculiar inspector criminalista Wright, quien se hará cargo de la investigación propiamente dicha y a través de cuyos interrogatorios iremos descubriendo nueva información mientras la historia avanza. Podría decirse que el cuerpo del libro se apoya sobre todo en el dibujo de los perfiles de cada protagonista que se nos destapa poco a poco, de tal manera que no solamente se crea interés, sino que nosotros mismos empezamos a crear nuestras propias hipótesis a propósito de quién ha podido ser el asesino o asesinos.
Blake es el típico muchacho rebelde y chulito de quien no se sabe nada, por lo que le toca ser el malo de la historia. Aunque, eso no parece importarle a Kenz, quien no dudará en tejer una especial relación con él. Ambos se entienden y… se encienden, también.
El devenir de los acontecimientos provocará que los protagonistas evolucionen ante nosotros de una manera distinta a como en un principio pudieramos anticipar. El libro se convierte en un baúl del que salen continuamente pistas con las que construir una explicación de lo que ha pasado.
Thriller típico con una trama apoyada principalmente en la cantidad de secretos o datos que desconoce el lector y que van aflorando según avanza la lectura. Esto se consigue no sólo a través del inspector Wright (quien está en un segundo término), sino mediante la investigación particular que lleva acabo la protagonista; muy determinada ella, va rascando información incapaz de creer que el responsable del asesinato haya podido ser uno de sus amigos, seres en quien confía de manera fiel.
Toda esta historia nos permite bucear en lo que es el día día de unos jóvenes que están a punto de alcanzar la veintena y que ven como la tragedia trastoca su día a día al tener a la policia detrás de ellos investigando el asesinato. Despechos, amores no correspondidos, celos y demás pasiones harán que todos parezcan sospechosos. ¿Os suena?
Quizá sea Blake el que mayor desarrollo tiene junto a la protagonista, fijándose el foco narrativo principal sobre ellos. Es un muchacho del que poco sabemos, más allá de que tiene un problema en casa con sus padres y con su hermano. Es el personaje más oscuro de la novela y también el que nos ofrece mayor riqueza, no sólo porque vayan a caer sobre él las sospechas, sino porque nos ofrecerá el contrapunto necesario a la protagonista. La trama se ve alimentada también por las relaciones entre los amigos, nuevos acontecimientos determinantes y el afloramiento de facetas desconocidas de los protagonistas.
Una historia de amor y amistad que se ve cercada por la tensión de un crimen atroz sin resolver. Un libro repleto de secretos y heridas del pasado que se destaparán ante nosotros en una lectura sencilla, fresca y rápida hasta el clímax final.
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