La ficción nos permite visitar otros mundos ajenos a nuestra propia realidad tangible, pero también estimula nuestra curiosidad, y si está bien planteada, hasta nuestro sentido crítico y conocimientos sobre una amplia gama de materias. Y al contrario, si están mal asesoradas inoculan en el imaginario popular innumerables bulos, supersticiones y causalidades erróneas que se dan por ciertas, y en ciertas situaciones, causan un perjuicio en este sentido. “La ciencia de la ciencia ficción” (Shackleton Books), de Manuel Moreno Lupiáñez y Jordi José Pont se centra precisamente en eso, en el análisis de obras icónicas de la Ci-fi, con el fin de comprobar si los supuestos que en ellas se contempla se ajustan a nuestro conocimiento científico o no.
Por supuesto, la ficción puede disfrutarse igualmente sin un adecuado respaldo de la ciencia, pero bien asesorada cumple una doble función, la de entretener y formar. Por supuesto, hay ficción que sería radicalmente distinta si nos ponemos exquisitos en este tema, e incluso inviable tal y como está planteada, pero conocer de verdad cuánta ciencia hay (o no) en estos mundos inventados nos ayuda también a imaginar otras ficciones, más o menos interesantes, pero seguramente más cercanas en el tiempo a su materialización. Algunas ficciones se hacen menos disfrutables si uno las desmenuza, pero ese no es el objetivo de este libro. El conocimiento es una espada de doble filo que debemos aprender a empuñar. El conocimiento puede ser compatible con una imaginación desbordada, con mantener el sentido de la maravilla.
Muchos autores reconocen la influencia de la ciencia –con su necesaria vertiente especulativa- en sus obras, y también las licencias que se toman para que sus ficciones resulten plausibles, ágiles y seductoras. Y por su lado, el mundo científico ha asesorado muchas obras de ciencia ficción, que han visto sus bases argumentales y tramas enriquecidas por este hecho. Aunque no se les suele hacer demasiado caso porque, como comentábamos antes, el impacto en el lector o el espectador se vería sensiblemente reducido. Y el espectáculo debe continuar.
¿Pero qué hay de cierto en estas tramas? “La ciencia de la ciencia ficción” visita universos como el de Star Wars, “Interstellar”, “Desafío total”, “El marciano”, Godzilla, el Universo Cinematográfico de Marvel, Star Trek, Alien, “Planeta sangriento”, “Espacio 1999”, “En el corazón de la Tierra”, “Navigator”, “Beyond the barrier”, “La Luna es una cruel amante”, “2001, una odisea del espacio”, “Independence Day”, “De la Tierra a la Luna”, “Moon” (2009), “Iron Sky”, “Misión de gravedad”, “Órbita de colisión”, “Planeta rojo”, la serie literaria sobre Marte de Kim Stanley Robinson, “Ultimátum a la Tierra”, “E.T., el extraterrestre”, “Depredador”, “¡Marciano, vete a casa!”, “Avatar”, “El núcleo”, “Solaris”, “Raza de guerreros”, “Gravity”, “Space cowboys”, “La máquina desintegradora”, “Contacto”, “Espacio profundo nueve”, “King Kong”, “El ataque de la mujer de 15 metros”, “El terror del más allá”, “Una princesa de Marte”, “Juego de Tronos”, “El imperio del fuego”, “El increíble menguante”, “La mosca”, “El chip prodigioso”, “Mars Attacks!”, “Esfera”, “Viaje alucinante”… en fin, todo un amplio repertorio.
En estas páginas se analizan aspectos tecnológicos, físicos, biológicos, etc, para determinar la coherencia argumental de estas y otras obras de ficción, lo que permite comparar unas con otras y en el proceso aprender sobre ciencia, sus límites actuales y las previsiones de desarrollo futuras. Si es la primera vez que tropiezas con un libro de este estilo, aprenderás mucho sobre cuestiones científicas básicas, ya sea sobre cosmología, óptica, física de partículas, exploración espacial, computación, física cuántica, biología, química… con referentes visuales o lectores que casi todos conocemos, y que hacen aún más entretenido un formato de divulgación distinto y transversal, muy asociado a la cultura popular y que por lo tanto penetra profundamente en la mente de cualquier humano curioso.
Los autores se han decidido por un tono distendido pero riguroso, fácil de leer y recordar, y que analiza distintas obras en variados formatos con frecuentes alusiones y comparaciones entre ellas. “La ciencia de la ciencia ficción” es un volumen adecuado para introducirse en las múltiples curiosidades científicas que salpican la cultura popular sin tener conocimientos previos, que permite la iniciación pero también en cierta medida la profundización en temas apasionantes y que todos hemos visto y veremos en libros, cómics, películas o series de televisión.
Viene acompañado de unos pocos apéndices, entre ellos un breve glosario de conceptos y lecturas recomendadas en formato físico y electrónico.
Manuel Moreno Lupiáñez es profesor titular del Departamento de Física de la UPC (Universitat Politècnica de Catalunya) y ha participado en la misión del satélite Hipparcos. Gracias a su labor divulgativa ha obtenido diversos premios y reconocimientos a lo largo de los últimos veinte años.
Jordi José Pont es catedrático y exdirector del Departamento de Física de la UPC. Es especialista en explosiones estelares, tema en el que lleva trabajando más de veinte años. Asimismo, ha desarrollado una intensa actividad de divulgación científica.