Se acerca el Tokyo Game Show y la expectación por la posible muestra de NX, que saldrá en marzo de 2017, es cada vez mayor. Especialmente tras el último Nintendo Direct dedicado exclusivamente a Nintendo 3DS. Mucho se ha escrito, casi todo en forma de rumores, orbitando el hermético secretismo de la gran N. Al mismo tiempo, los comentarios de diversos profesionales de la industria, como Yves Guillemot de Ubisoft, no podrían ser más esperanzadores. ¿Deberíamos dejarnos llevar por la emoción o nos llevaremos una gran desilusión?
He de reconocer que empiezo a sentirme un poco como antes del lanzamiento de Wii, y es que la escena recuerda mucho a esa situación. Se barajan conceptos que al principio nos parecían impensables pero ya cada vez nos parecen más evidentes e inevitables. Ya casi ni nos acordamos de los sorprendente y revolucionario que fue el control por movimiento y de la cara que se nos quedó cuando lo vimos anunciado en aquel E3, ni de la sonrisa en la cara de nuestros padres cuando lo probaban. Ahora, con los rumores de la NX, ya hemos pasado el punto de inflexión y un híbrido de sobremesa y portátil con cartuchos parece un paso tremendamente lógico y casi una apuesta segura.
Hola, soy un logo especulativo y no oficial, pero cualquier cosa es mejor que la imagen del mando falso que circula por ahí
Si Nintendo se ha propuesto tender puentes y unificar la experiencia del usuario en este sentido, difuminando los límites entre sobremesa y portátil, y si lo hace bien, creo que estamos ante otro punto de inflexión similar a lo que experimentamos con aquella Nintendo Revolution, no sólo a nivel de jugabilidad, sino también a nivel de atracción de más y más jugadores.
Además, este movimiento, de confirmarse, sería excelente en muchos sentidos, debido a varios factores: el mercado portátil, incluyendo los juegos para móviles, está cobrando cada vez más fuerza; dado que ya la tecnología lo permite, queremos tener siempre nuestras cosas con nosotros, tanto si estamos en casa como de viaje o de vacaciones: fotos, libros y, ahora también, juegos…; Sony y Microsoft parecen estar tomando un camino distinto, el camino de acercamiento a los ordenadores, lo cual podría llevar a su fusión en un mismo sistema y a la desaparición de las videoconsolas como tales.
Antes he dicho “si lo hace bien”. Eso es importante, así que detengámonos un momento en ello. ¿Por qué creo que lo va a hacer bien? Nintendo aprendió mucho con GameCube y el siguiente paso fue Wii. No me cabe duda de que también ha aprendido mucho de los errores cometidos con Wii U y que utilizará esa información para hacer las cosas bien ahora. Pero eso, así, por sí mismo, es inducción pura y dura y poco más. Reconozco que el secretismo también resulta evocador y creo que el celo con el que están protegiendo este proyecto promete grandes sorpresas. Y, además de los comentarios alentadores de otros profesionales de la industria, éste proyecto comenzó bajo la visión de Iwata, lo cual hasta ahora ha sido casi siempre sinónimo de calidad y de ir un paso más allá. Por no hablar de lo maravillosamente excepcional que pinta el nuevo Zelda; Breath of the Wild puede ser, por sí mismo y con mucha facilidad, razón suficiente para muchos para hacerse con una NX.
The Legend of Zelda: Breath of the Wild. Esta delicia inaugurará la NX en marzo
Nintendo siempre ha sabido abrir caminos nuevos y llevar la jugabilidad hacia nuevos niveles: con los gatillos, con el stick analógico, con la vibración, con la pantalla táctil… Y todos esos elementos fueron tan populares y enriquecedores que llegaron para quedarse. El control por movimiento fue el último salto y, ahora, nos vemos ante la frontera del siguiente eslabón. Es emocionante ver que incluso algunas de las personas más críticas con Nintendo están ilusionadas y llenas de expectación. Esperemos salir de dudas en un par de semanas. Mientras tanto, terminaré con un comentario de Phil Spencer, jefe de Microsoft: “cuando Nintendo lanza una nueva consola es un momento muy emocionante para la industria"
