La Flota Fantasma es un cómic autoconclusivo que nos trae Norma Editorial en un tomo único en formato cartoné. Donny Cates (Veneno) es el encargado de guionizar esta épica historia, mientras que a los lápices se encuentra Daniel Warren Johnson (Wonder Woman: Tierra Muerta).
Esta historia tiene como protagonista a la Flota fantasma, una «empresa» dedicada a transportar mercancías e información peligrosa sin ser detectada. La historia comienza con un transporte rutinario. Un camión traslada una mercancía secreta, custodiado por dos de los mayores expertos en combate del mundo. Nadie sabe qué se esconde en la parte de atrás del camión, pero de repente un grupo armado comienza a atacarles. Tras conseguir repeler el ataque, Trace, uno de los agentes que custodiaban la carga, decide echar un vistazo. Ward, el otro agente especial, traiciona a su compañero y le dispara.
Tras este preludio, Trace aparece en mitad del desierto en el maletero de un coche. Y aquí es donde verdaderamente comienza esta historia, una historia de venganza.
La idea de Donny Cates
Donny Cates es el encargado de trazar los hilos de esta historia de acción y venganza, convirtiendo La Flota Fantasma en un thriller que mezcla ciertos elementos de otros géneros (que por el bien del lector, es mejor no mencionar).
Si bien la historia comienza al estilo Mad Max, la trama va evolucionado, acercándose cada vez más a John Wick, con guiño y todo. Y es que este cómic pretende ser una obra de acción entretenida que divierta al lector. Para ello, utiliza varios elementos de la cultura actual y los homenajea, convirtiendo a La Flota Fantasma en un cómic increíble.
A nivel narrativo, Cates tiene las ideas claras. Sabe lo que quiere conseguir en el lector y como hacerlo. Consigue introducir un sencillo misterio (¿Qué mercancía transportaba el camión?), y a raíz de ahí, engancha al lector que desea saber no sólo eso, sino si Trace conseguirá la venganza que tanto ansía.
El lector acompaña a Trace a lo largo de su recorrido para encontrar al traidor de su ex-compañero, y ajustar cuentas. Mientras, un tercer personaje aparece en juego, el cual intentará cumplir su encargo: quitar a Trace de la ecuación.
Toda la historia carece de excesiva profundidad. La intención de Cates es entretener, y La Flota Fantasma cumple su cometido a la perfección. Y es que el guionista sabe enganchar al lector; sabe presentar personajes en muy pocas páginas, y sabe mezclar géneros con una facilidad pasmosa. Por no hablar de la épica que intenta introducir en cada página.
Los dibujos de Warren Johnson
Al color le acompaña Lauren Affe, quien hace un muy digno trabajo. Especialmente en algunas escenas en las cuales la acción y el contenido de la viñeta tiene tal cantidad de información, que el lector se perdería parte de la experiencia sin sus pinturas.
Los problemas de publicación de La flota Fantasma
La Flota Fantasma es un cómic publicado en 2014. Cates y Warren comenzaron a trabajar juntos en esta obra que se compondría de 12 números. Pero tras la mala recepción del primer número, la editorial Dark Horse cambió los planes, ofreciéndoles cerrar la trama en sólo 8 números.
La pareja creativa estaban a punto de terminar el 6 número. Tras modificarlo, tuvieron sólo dos números más para cerrar esta loca aventura.
Esto es lo que otorga el único factor negativo de La Flota Fantasma. Y es que el cierre de la trama se ve obligado a terminar de forma apresurada, lo que puede dejar al lector con una sensación un poco extraña, dado que se nota la prisa por acabar todo en muy pocas páginas.
Conclusión
La Flota Fantasma es una obra repleta de acción, épica, y varios guiños a la cultura popular. Sin una excesiva complejidad, consigue entretener al lector, hacerle pasar un buen rato y conseguir que se pregunte: ¿Qué había en la caja del camión?.
Si vas buscando esto, La Flota Fantasma es tu cómic. Cumple con todo lo que ofrece, y sobradamente. La trama creada por Cates consigue enganchar desde el principio, y eso que personalmente el tema de la flota de camiones que transportan mercancías secretas no me llamaba la atención. Cuál fue mi sorpresa al leermela del tirón totalmente enganchado.
Por su parte, Warren hace un trabajo magnifico en cuanto al dibujo. Las escenas de acción se entiende bien, los personajes son fácilmente reconocibles, la sensación de acción y velocidad está latente en toda la obra… Una labor que encaja a la perfección con el tipo de historia que querían contar.
Cómo ya se ha mencionado en este post, la única pega la tiene el apresurado final, y dadas las circunstancias, consiguieron hacer un buen trabajo. Tener que reducir 6 números a dos es una labor titánica que consiguieron realizar con un resultado bastante decente. Aún así, se echa en falta que esta gran obra hubiese estado compuesta por los 12 números de los que iba a constar originalmente.
En resumidas cuentas, La Flota Fantasma es un cómic que recomiendo a todos los lectores, siempre que sepa uno que esperar de ella. Además, por sus grandes dosis de acción y escasa complejidad, es una obra muy interesante para nuevos lectores del noveno arte.