En las profundidades de la superficie de arcilla roja de Marte se encuentran antiguos océanos ahora congelados en capas de hielo. La luna de la Tierra también tiene depósitos de agua ocultos, depósitos incrustados profundamente dentro de sus rocas. Es el tipo de tesoro líquido que los científicos de la NASA esperan extraer algún día utilizando herramientas de perforación especializadas en la Luna o Marte.
Mientras la NASA busca nueva tecnología para usar en el espacio, la agencia está extrayendo un tesoro diferente para ayudar a desarrollar esas herramientas: el ingenio de los estudiantes de ingeniería.
Si los astronautas pueden fabricar el combustible o los materiales de soporte vital, como agua y oxígeno, para ir a la Luna o a Marte, ayudará a aligerar la carga de envío
Con ese fin, 10 equipos de estudiantes de universidades de EE.UU, incluido un equipo de Virginia Tech, se reunieron el viernes en el Centro de Convenciones de Hampton Road para compartir prototipos de máquinas perforadoras controladas a distancia durante el «Desafío de prospección del hielo de la Luna y Marte». El evento fue una competencia de tres días que comenzó el jueves y terminó el sábado.
Los prototipos de los estudiantes intentaron extraer y recolectar la mayor cantidad de agua del hielo enterrado dentro de paisajes lunares y marcianos simulados (tierra, arcilla, arena) empaquetados dentro de tinas azules gigantes. Es una tecnología que la NASA necesita. En lugar de enviar toneladas de agua al espacio con los astronautas, es más fácil y ahorra millones del presupuesto extraer el agua allí.
«Lo más interesante de esto es que tiene que ser completamente independiente. Tiene que hacerse en su mayor parte de forma autónoma«, comenta Shlok Agarwal, un estudiante senior de 21 años que dirige el equipo de Virginia Tech. «Esto nos ayuda a explorar la superficie de Marte y obtener agua allí. Pero si enviáramos esto sin astronautas, podríamos controlar todo en esa plataforma desde la Tierra«.
El agua es necesaria para el sustento de la vida y para producir combustible de cohetes que lleven a los astronautas a casa. Se necesita mucha masa para las misiones a Marte, comenta el ingeniero aeroespacial del Centro de Investigación Langley de la NASA, Chris Jones, y reducir eso es un objetivo principal. Si los astronautas pueden fabricar el combustible o los materiales de soporte vital, como agua y oxígeno, ayudará a aligerar la carga de envío.
Un mundo con depósitos de hielo bajo la superficie
«Por cada kilo que pongamos en la superficie de Marte, podría tomar de 20 a 30, incluso más veces ese peso lanzarlo desde la Tierra para que llegue allí«, afirma Jones. «Ahorrar unos 500 kilos de combustible para viajar a Marte podría muy fácilmente conviertirse en decenas o cientos de miles de kilos que pueden llevarse desde la Tierra«.
Rick Davis, director asistente de ciencia y exploración de la NASA, comenta que los científicos han ido descubriendo evidencias de agua en la Luna y Marte durante los últimos 15 años. En la luna, los depósitos de agua se mezclan en el suelo, probablemente debido a que los cometas impactan la superficie de la luna, comenta Davis. Además, la Luna tiene cráteres que no reciben luz solar y, como resultado, permanecen extremadamente fríos. Si el agua se deposita en un cráter, permanece allí. Pero debido a que hace tanto frío en la luna, la mayoría de las máquinas no funcionan bien. «Acceder (al agua) es algo muy complicado«.
Hace miles de millones de años, había océanos y glaciares en Marte similares a la Tierra, según Davis. Pero a medida que el planeta rojo comenzó a perder su atmósfera y se volvió más congelado, algunos océanos se evaporaron. Algunos todavía están allí, pero cuando la NASA lanzó satélites orbitadores para buscar lagos subterráneos, la agencia encontró algo inesperado. «Encontramos todas estas capas de hielo«, agrega Davis.
Talento joven para los mayores desafíos
Para la competencia, los proyectos de los estudiantes están siendo juzgados por la cantidad de agua que pueden extraer sus plataformas en cualquier forma. También se valorará su proceso y lo realista de su concepto para su uso en la Luna y en Marte. El equipo ganador se anunciará hoy, según funcionarios de la NASA Langley.
Agarwal comenta que ha estado trabajando en este proyecto desde su segundo año y creó el equipo que nombró y ahora dirige: el Equipo de análisis del subsuelo marciano o MSAT. Este año escolar, recibió 80 solicitudes de estudiantes que quieren unirse al proyecto.
Anaya Acharya, de 21 años, miembro del equipo que se especializa en ingeniería eléctrica en Tech, recuerda que su madre, que tiene una maestría en física, la animó a dedicarse a la ingeniería. «A ella siempre le dolió no haber hecho ingeniería. Fue una de mis modelos de apoyo«, comenta Acharya. «Hay esperanza para ingenieros muy jóvenes que puedan venir y desarrollar algo para el conjunto de la sociedad«.