Antes de nada para situarnos hablar de nuestro protagonistas. Los adorables nuevos vecinos del número 616 de la calle Hickory Branch en Arlignton Virginia, están comandados por el cabeza de familia, Visión, personaje creado en 1968 por Roy Thomas y John Buscema en Avengers vol. 57. Este androide creado a semejanza de los humanos y con la particularidad de sentir ha sido un miembro imprescindible de los Vengadores desde los 70, protagonizando varios momentos estelares como su romance con la Bruja Escarlata. Actualmente Visión forma parte de los “All New All Different Avengers” de Mark Waid y nos dejó a todos boquiabiertos cuando recientemente tomó la decisión de suprimir su chip emocional para empezar una nueva vida, dejando atrás su pasado con Wanda.
Y ese cambio de registro lo tenemos aquí, no sabemos cómo pero Visión ha creado toda una familia de sintezoides, ellos son la comedida y dulce esposa y ama de casa, Virginia, el impulsivo y descontrolado Vin y su hermana, la ingenua y enamoradiza Viv.
Éstos son las piezas de este macabro juego de engaños que King juega con nosotros. El primer elemento perturbador en este viaje, es un narrador que nos va adelantando que la idílica vida que nos muestra el contenido trazo de Walta, un narrador que según va avanzando la trama nos trae de vuelta a un viejo recuerdo de la vida de Visión con Wanda.
Así con el pretexto de la visita de los buenos de George y Nora encontramos este extraño costumbrismo en el que puede habalrse del tiempo o de galletas a la vez que se contempla un mechero del Capitán América o un jarrón de agua de Zenn-La. Primeros días de instituto, preocupaciones nocturnas y adaptación a una nueva vida que se verán sesgadas por una tragedia que va a cambiar drásticamente la vida de los Visión.
A partir de aquí King nos cuenta la típica historia de una familia que debe guardar un secreto entre sí y como eso los va carcomiendo por dentro. Los problemas típicos que pudieran darse en cualquier familia se acrecientan si eres un extraño sintezoide, una simple pelea de instituto puede casi acabar en un homicidio porque es lo que tiene que todos los Visión tengan los mismos poderes que su padre-creador y a la vez mostrarnos una discusión de despacho del director en el que la Visión tira de “¿sabes que soy amigo del Capitán América verdad?”.
Es una obra de personajes, en el que la trama se cimienta en ellos, en los miedos de Viv, en la frustración e incomprensión de Vin o en la desesperación de Virginia. King relata una critica al falso modelo de vida ejemplar y de familia ideal. Y es que esta obra trata del absoluto y racional egoísmo de la Visión, de cómo enfocar el amor no desde el sentimiento sino desde la lógica de lo que debe ser. Un modelo creado y diseñado para funcionar como un reloj. Vemos a la vez a una Visión más humana e inhumana que nunca, llevado por las bajas pasiones bajo una patina de racionalidad, porque si eliminas el afecto qué te queda, la necesidad de una inexistente perfección.
La interacción de los sintezoides con los humanos, ese contraste de fría lógica y emociones y el efecto avalancha por el cual intentar tapar un mal provoca una sucesión de desdichas que al final hacen que no pueda darse marcha atrás, la tierra en nuestro pies se remueva y saque fuera los esqueletos en nuestro armario. Evitar una tragedia ha provocado tragedias mayores. Cada miembro de la familia tiene su momento estelar y representa a la perfección momentos que o hemos vivido o nos han tocado de cerca. La rabia y frustración de Vin, la necesidad de encontrar un lugar de Viv. Pero sin duda el personaje que lleva toda la obra es Viriginia, King ha creado todo un drama en torno a la desesperación de alguien que sólo tiene un objetivo, hacer feliz y proteger a su familia. No esperéis grandes superbatallas ni mallas por aquí, el dolor y la tragedia como en la vida real puede venir de un tipo tan normal como tú o como yo, un opuesto con el mismo objetivo, y es que en esta vida a veces para proteger a los tuyos debes herir a los de enfrente.
Y llega el momento del final el momento en el que esperamos que la Visión lo arregle todo, que igual que pelea contra Giganto y otras amenazas con los Vengadores logre salvar a su familia, y lo hace pero desde luego, ni por asomo como lo podíamos esperar. Y si pensábamos que todo esto acabaría pronto nada más lejos pues un nuevo miembro se une a la familia. Consternados contemplamos que la felicidad de Visión y su nueva vida es lo único que le importa, lo que sin duda significa un problema de escala vengadora.
Pueden parecer palabras fáciles pero sin duda este tomo es de lo mejor que ha sacado Panini y Marvel en 2016, es una obra maestra equiparable al “Ojo de Halcón” de Ajá y Fraction, una perturbadora obra que nos va a dejar inquietos en su desarrollo, en esa molesta y artificial “nomalidad” y que luego va a sesgar nuestra incredulidad descubriéndonos contando los meses que falten para que se respondan las miles de preguntas que se nos han generado.
¿Quién y cómo ha creado al resto de los Visión?¿Hasta dónde está dispuesto a llegar Visión para preservar la vida que se ha creado y qué consecuencias va a tener eso para el resto del mundo. Nos vemos pronto recordad en el 616 de e la calle Hickory Branch en Arlignton,Virginia, nos asustéis por el ruido y los socavones, son una familia peculiar hasta en la redecoración.