Un ensayo, imperdible para los aficionados al género detectivesco, que aborda la historia de los primeros detectives privados. Y, muy especialmente, la de los pioneros de esa profesión en nuestro país.
Puede verse ya en los escaparates de las librerías la obra Todo lo oye, todo lo ve, todo lo sabe, de José Luis Ibáñez, que acaba de publicar la editorial Espasa.
Se trata de un amplio, completo y bien estructurado ensayo dedicado a la trayectoria de los primeros detectives privados. Y, muy especialmente, a los pioneros de esa labor detectivesca en nuestro país.
A partir del nacimiento de la profesión de detective, que cabe situar en Francia y Estados Unidos en los albores del siglo XIX, el autor trata lo complejo de su implantación en España.
Un país marcado por una incesante violencia política y cuyo inestable modelo policial estaba condicionado por los vaivenes políticos.
Recorre la historia de los pioneros de la seguridad privada, ahonda en los perfiles de los primeros detectives particulares y radiografía primeras agencias de detectives.
Leyendo las páginas del libro, el lector conoce sus métodos de trabajo y la relación de ambigüedad que mantenían con la policía oficial. Todo ello respaldado con datos y amenizado con anécdotas. Y ejemplificado con el relato de algunos de sus casos más curiosos, no siempre muy conocidos:
De la contratación por el Gobierno de Alfonso XII de detectives para seguir los pasos de su madre, Isabel II, en París, al acuerdo de la embajada española en Washington con la famosa agencia Pinkerton para espiar a los independentistas cubanos en Estados Unidos.
Esperamos poder escribir próximamente la reseña de esta novedad editorial, que incorpora la editorial Espasa a su amplio catálogo.