Los ángeles de Auschwitz: otra historia ambientada en el infierno.
Si hay algo que acompaña a todas las historias ambientadas en la 2º Guerra Mundial es la tristeza y la devastación. Si, además, la historia habla de las experiencias que vivieron los judíos en los campos de concentración, el regusto final suele ser aun más triste y amargo. Sin embargo, en ocasiones hay personas que se atreven a hacer algo diferente y Los ángeles de Auschwitz – publicado por Norma Editorial, los encargados de traernos obras maestras como La Bomba – es la prueba de ello.
Una nueva visión del Holocausto
Stephen Desberg y Emilio Van der Zuiden nos trasladan hasta 1940, momento en el que los judíos empiezan a llenar los campos de concentración repartidos por gran parte de Europa. En este contexto, la historia nos presenta a un judío justo en el momento de su captura por los nazis y su posterior traslado a Auschwitz.
Durante las primeras páginas del cómic, los autores se encargan de dejarnos claro que Auschwitz es un infierno y que ninguno de ellos saldrá de allí con vida. Los pocos personajes a los que podemos ponerles nombre terminan asesinados pocas páginas más tarde, y la sucesión de caras no se detiene nunca.
En mitad de todo este horror, los presos se apoyan unos a otros y se preguntan, en susurros, porqué nadie se organiza para revelarse. La respuesta es sencilla: una persona destrozada mentalmente no tendrá fuerzas para organizarse y luchar.
¿Había ángeles viviendo en Auschwitz?
Con este panorama desolador, entra en juego un concepto que no vimos venir: la religión y los ángeles. El protagonista cree fervientemente en la existencia de unos ángeles protectores que, aunque no pueden intervenir en la catástrofe que están viviendo, si pueden tomar nota para juzgar más adelante a cada persona que ha formado parte del problema.
El rumor sobre la existencia de unos ángeles protectores tarda poco tiempo en recorrer todo el campo de concentración, lo que lleva a lo judíos a apoyarse entre sí y, sobre todo, a tener esperanza justo antes de morir.
Esto lleva al desarrollo de una trama en la que entran en juego la vergüenza por los actos cometidos, el amor a la familia, el odio y la crueldad. Cada uno de estos elementos va encajando a la perfección en una historia muy sencilla que no busca sorprender ni dejar huella, si no mostrarnos una visión diferente de un horror que ya hemos visto muchas veces.
Un dibujo que sorprende
A diferencia de lo que podríamos esperar, Los ángeles de Auschwitz cuenta con un estilo de dibujo colorido y, en ocasiones, casi alegre que busca representar ese rayo de esperanza que vive en los corazones de cada uno de los miembros del campo de concentración.
Pese a que la obra no tiene problemas en mostrarnos los horrores de la guerra, lo cierto es que lo hace de forma que no nos quedemos con lo más oscuro de la historia.
Conclusiones de la reseña de Los ángeles de Auschwitz
Pese a que no es una obra redonda, Los ángeles de Auschwitz es lo suficientemente original para que su lectura merezca la pena. Es posible que una duración algo más extensa le hubiese venido bien pero, aun así, la historia queda lo suficientemente bien cerrada como para que merezca la pena su lectura.
Quien busque una historia diferente sobre el Holocausto, encontrará aquí lo que está buscando.
