Los Omniscientes es el nombre de un grupo de cinco adolescentes que una mañana se despertaron con todo el conocimiento del mundo en sus cabezas. Este extraño fenómeno alerto al FBI que se puso en contacto con ellos para «protegerlos». Pero hay un pequeño grupo de extremistas dentro de la organización que creen que ese conocimiento absoluto debería estar a las órdenes de su país.
En este entramado de intereses, los cinco jóvenes se vuelven como hermanos, y se apoyarán unos a otros mientras intentan descubrir el origen de su extraño poder. Por suerte, cuentan con la ayuda de un profesor que velará por su seguridad y bienestar.
Pero si todo esto fuera poco, de repente surge otro grupo de adolescentes con los mismos poderes, e intereses muy diferentes a los Omniscientes. Este grupo desea reiniciar la cultura, y pretende destruir todo el conocimiento para empezar de cero en una nueva civilización.
Formato
Los Omniscientes es un cómic europeo escrito por Vicent Dugomier e ilustrado por Renata Castellani. En España ha sido publicado por la editorial Astronave (La materia Oscura, Royaltie Witches) , en un formato cartoné de gran tamaño, propio del género europeo. Este primer volumen es un integral donde se reúne todo el arco argumental. Pero se espera que se vayan publicando nuevos números con las aventuras de los Omniscientes.
El guion de los Omniscientes
Vicent Dugomier es el encargado de guionizar esta historia que está enfocado a un público adolescente y juvenil. El tono de la historia, así como los diálogos y ritmos están pensados para enganchar a los lectores más jóvenes.
La trama presenta una premisa interesante: el conocimiento absoluto gestionado por un grupo de adolescentes. Además, cada uno de ellos desarrolla una habilidad especial con respecto al conocimiento (como absorber y procesar más rápido que el resto el nuevo conocimiento), lo que les da ciertas ventajas.
Estos poderes están bien pensados en su mayor parte, lo que permite a cada personaje ser de ayuda en algún momento de la historia, equilibrando muy bien los tiempos de cada uno.
Ademas, Dugomier sabe establecer muy bien los ritmos y los misterios, presentando escenas que el lector no puede comprender. A lo largo de la obra, van apareciendo viñetas de primer plano sobre un lugar desconocido, donde una persona talla una piedra. Este misterio es constante a lo largo de las páginas, y ayuda a enganchar al lector, que siente la necesidad de conocer todo el contexto de la historia. Esto, junto con una escalonada presentación de los personajes, hace que el ritmo funcione muy bien, siendo fácil de leer.
La peor parte
Pero la conclusión de este misterio parece que no termina de encajar con la trama. El guionista presenta un cliffhunger que deja un sabor amargo. La base en la que se sustenta toda la trama una vez se descubre este giro de guion no termina de funcionar, al menos en este primer tomo.
Por otro lado, la existencia de una organización que vela por salvaguardar toda la cultura y el conocimiento humano en una base perdida de la Antártida es un factor muy potente que encaja muy bien con la idea de la trama, pero que al menos en esta primera historia no se explota lo suficiente, quedando como algo casi anecdótico (al menos por ahora).
La ilustración de Los Omniscientes
El dibujo corre a cargo de Renata Castellani. Los Omniscientes es la primera serie de la autora, que hace un digno trabajo. Con un estilo de dibujo claro y preciso, la autora consigue establecer un formato cartoons muy apropiado para el tipo de lectores que se espera de esta obra. Hay que recordar que Los Omniscientes está pensando para una edad a partir de 9 años, siendo las edades entre 10 y 15 años su público objetivo.
Teniendo en cuenta a quien va destinado esta obra, el dibujo cumple a la perfección. Un trazo limpio, escenas detalladas sin sobrecargar, gran trabajo de los fondos y lugares. Sin duda un gran trabajo que puede atraer a los jóvenes por el estilo de dibujo.
Conclusión
Los Omniscientes es un buen cómic con un público muy marcado. Está enfocado a lectores jóvenes y se nota tanto en el apartado gráfico como en el guion. Esto no empaña la obra, pero debe conocerse este dato de cara a enfrentarse a ella.
Los ritmos funcionan bien, igual que la trama, siendo su punto negro la base en la que se sostiene. Si bien los misterios y la estructura narrativa está muy conseguida, la resolución del misterio y el origen de estos poderes del conocimiento absoluto flaquea por todos lados. Es aquí donde se nota también el enfoque de la obra. Para los jóvenes puede funcionar esta resolución. Pero un lector experimentado la vera poco elegante o falto de interés una vez que se conozca.
Y aunque parece que la historia llega a su fin, en realidad ya hay publicados tres tomos. Sólo este se ha publicado en español. Queda por conocer cuando se publicarán los otros volúmenes. Y la verdad es que no se me ocurre por donde pueden seguir desarrollando la trama.
En cuanto al dibujo, poco queda que añadir. Un dibujo que tiene un trazo limpio, con cantidad de detalles sin sobrecargar ni pretender ser realista, acercándose al estilo cartoon que funciona muy bien con el tipo de público para el que va dirigido.
Los Omniscientes me ha parecido un buen cómic juvenil. Muy enfocado a ese público y totalmente recomendable para ellos. Para las personas adultas también me atrevería a recomendarlo siempre que se conozca lo que se puede esperar de esta obra.
