Una aproximación al terror muy distinta a la habitual.
Hace solo unos días tuvimos la oportunidad de hablar largo y tendido sobre P.T.S.D., un cómic muy interesante publicado por Grafito Editorial y, en esta ocasión, vamos a centrarnos en Maestro del terror, otra de las obras de la editorial que ha llegado a las estanterías de todas las librerías gracias a las mentes de Manuel M. Vidal y Josep Busquet.
¿Qué oculta en sus páginas Maestro del terror?
Desde el momento en el que empezamos a leer, queda claro que detrás del guion de Maestro del terror hay un gran fan del género que ha crecido escuchando y estudiando las leyendas detrás de todos esos autores clásicos que han estado rodeados de rumores sobre su conexión con lo paranormal y, es que, esta historia bebe mucho de todo eso.
El protagonista de nuestra historia es Antonio Rodell, un escritor de historias de terror que está teniendo muchísimos problemas para que las editoriales se interesen por sus historias. Hundido y desesperado, Antonio decide visitar una tienda de libros de segunda mano para desconectar de su problema y, entre las pilas de libros de la tienda, encuentra dos historias de terror publicadas bajo el sello de una editorial que desconocía por completo.
Tras una larga labor de investigación, llega a la conclusión que la editorial ha desaparecido y nadie conoce su existencia, lo que le lleva a plagiar las obras para convertirse en un autor de éxito gracias a ellos. Sin embargo, durante la firma de uno de «sus libros», un fan afirma conocer su secreto y le regala un tercer libro de esa editorial… Y hasta aquí podemos leer.
Cambios de tono
Sin entrar en detalles, la primera parte de Maestro del terror bucea en la vida que rodea a los escritores, hablando del Síndrome del Impostor, el estrés por publicar una novela tras otra que siga interesando a los lectores y el miedo a quedar eclipsado por otros autores.
La segunda mitad del cómic da un giro de 180º para ofrecernos escenas sacadas de las mejores películas de terror en las que el gore y los monstruos son los protagonistas y dónde la situación escala y se descontrola rápidamente hasta llegar a un final que recuerda, una vez más, al de muchas películas de terror clásicas en las que los protagonistas se ven tentados por la oscuridad.
Lo cierto es que, en nuestro caso, la primera parte de Maestro del Terror nos ha parecido más sólida e interesante que la segunda por cómo abordar la vida del escritor, sus dudas y sus miedos y nos habría gustado que el resto de la historia siguiese en esa misma línea pero, aun así, el cambio de tono y ritmo nos ha parecido una idea original y arriesgada capaz de sorprender.
Una atmósfera oscura
El guion de Maestro de terror se apoya en el dibujo de Manuel M. Vidal que ha optado por un estilo de trazos finos y diseños realistas cargados de detalles en los que la iluminación y las sombras juegan un papel clave en cada viñeta. El uso de la luz a la hora de representar la caída en desgracia del protagonista es brillante y demuestra que hay mucho trabajo y cariño detrás dela obra.
El uso del color, de los gestos de los personajes y de la estética de los propios objetos y escenarios contribuye a dotar de un carácter muy marcado a una historia que se apoya mucho en estos elementos para sorprender al lector cada pocas páginas.
Conclusiones de la reseña de Maestro del Terror
El cómic Maestro del Terror ha resultado ser una obra interesante especialmente dirigida para los fans del género que busquen una aproximación diferente a la que podemos ver en otros cómics, libros o películas. Aunque su segunda mitad no nos ha gustado tanto, creemos que, en general, es una obra lo suficientemente divertida como para adentrarse en ella y descubrir los secretos que esconde.