Defiende la Tierra de los monstruos en la gran batalla por la supervivencia de Mechs V Kaijus
Pese a que los tower defense no pasan por su mejor momento en cuanto a popularidad, lo cierto es que, de un tiempo a estar parte, hemos recibido propuestas interesantísimas que no tienen nada que enviar a los grandes pesos pesados del género. La última propuesta en intentar ganarse un hueco en los corazones de los jugadores ha sido Mechs V Kaijus, cuya ambientación y argumento bebe de universos y películas como Pacific Rim. ¿Serás capaz de defender la Tierra de los terribles monstruos que han venido a destruirla?
La última esperanza de la humanidad
Como decíamos hace unas líneas, Mechs V Kaijus nos sitúa en un contexto de sobra conocido por todos los fans de la ciencia ficción: somos defensores de la última frontera contra las masivas hordas de Kaiju, mientras intentamos proteger los restos de la vulnerable humanidad.
Con los Kaiju emergiendo en la Tierra y un ejército regular ineficaz, recae en nosotros, equipados con poderosos trajes robóticos, asumir la defensa y repeler la oleada de monstruos. Afortunadamente, cada Kaiju derribado contribuye a nuestra causa, ya que nos provee de fondos para fortalecer nuestras defensas.
Preparando la última defensa
Como ocurre en otros muchos juegos del género, la mayor parte del tiempo la pasaremos planificando y construyendo torres con las que detener el avance de los monstruos. Cada monstruo cuenta con sus propias fortalezas, debilidades y tipo de movimiento y, por supuesto, tendremos que combinar todas nuestras torres para maximizar la efectividad de nuestra defensa. Así podremos impedir el paso de los enemigos hasta los escasos supervivientes.
Un mal endémico del género es que el equilibrio de las torres suele estar poco cuidado y, con el paso de las horas, queda claro que es mejor centrarse en construir un par de torres concretas en lugar de crear una variedad de estructuras. Por suerte, en esta ocasión la variedad de opciones de defensa y la capacidad de mejorar nuestras fortificaciones nos invita a experimentar con diferentes tácticas y crear todo tipo de combos para conseguir la puntuación perfecta en cada uno de los múltiples escenarios del modo campaña.
Con el objetivo de potenciar la sensación de planificación y estrategia, el juego cuenta con una opción llamada Menú de Defensa. Este nos permite planificar nuestras estrategias en un entorno de tiempo ralentizado para evitar que caigamos en la fórmula de construir decenas de torres idénticas para no perder tiempo pensando en medio del caos. Al tener la oportunidad de ralentizar el tiempo es posible pararse a pensar unos segundos para aprovechar al máximo nuestra economía. De este modo, podremos construir los edificios más efectivos dependiendo de la situación.
Un tutorial que te puede salvar la vida
Vamos a aprovechar la ocasión para hacer hincapié en la importancia de completar el tutorial. El juego cuenta con decenas de pequeñas mecánicas muy particulares de las que podemos sacar provecho pero que puede costar descubrir de manera natural. Pasar un rato en el tutorial puede simplificar mucho las cosas y ayudarnos a entender mejor algunos de los elementos clave del juego.
Una guerra pixelada
El aspecto visual cuenta con un estilo pixel art muy detallado en el que destacan, sobre todo, el diseño tanto de los mechas como de los Kaiju. La perspectiva lateral del juego, donde protegemos una muralla a la izquierda y enfrentamos a los Kaiju que se acercan desde la derecha, permite ver el trabajo que se ha hecho para dotar a cada unidad de su propia personalidad.
En lo que respecta al apartado sonoro, el juego ha recreado con mucho acierto los efectos de explosiones, armas y hasta los chillidos de los Kaiju. Esto garantiza que cada batalla suene tan épica cómo se siente mientras jugamos.
Conclusiones del análisis de Mechs V Kaijus
En resumen, Mechs V Kaijus es una opción muy interesante para los amantes de los tower defense. El equilibrio de sus unidades, la variedad de tácticas y estrategias y lo divertido de sus mecánicas lo convierten en un título mucho más profundo de lo que parece a simple vista.