¿Quieres entrar en el mundo de la creación de contenido?
El mundo del contenido en streaming no para de crecer. Cada vez son más las plataformas y los creadores de contenido que están optando por este tipo de contenido debido a la alta tasa de visualizaciones, interacción y comentarios que generan en comparación con contenidos a la carta como vídeos de Youtube o los propios artículos de revistas online como Fantasymundo.
Sin embargo, crear contenido en streaming para plataformas como Twitch o Youtube requiere de una inversión previa en un equipo que nos permita emitir sin parones o ralentizaciones, grabar nuestra cara o la pantalla y un micrófono con el que narrar todo lo que sucede en pantalla. Independientemente de la inversión económica para hacerse con todo este equipo, hay que tener en cuenta que es necesario tener conocimientos o nociones básicas de tecnología para comprar los mejores modelos que cumplan con unos requisitos mínimos en relación calidad/precio con los que podamos conseguir un resultado óptimo durante los streamings.
Aquí viene el primer problema: no todo el mundo entiende de webcams, de capturadoras de vídeo o de la calidad y frecuencia del audio del micrófono para streaming que hay que usar para empezar a emitir en directo. Por suerte, cada vez tenemos una mayor cantidad de páginas webs especializadas en realizar comparativas entre dispositivos con los que podemos analizar y comprobar las ventajas y desventajas de cada uno de ellos para hacernos con el mejor posible dentro del presupuesto que tengamos disponible.
Pasos básicos
Una vez que tengas claro que dispositivos vas a usar, lo siguiente que necesitas hacer es instalar y aprender a controlar uno de los programas de emisión que son compatibles con plataformas como Twitch.
Actualmente te recomendamos que te decantes por OBS Studio o Streamlabs OBS. Ambas opciones son muy similares y cuentan con una interfaz y una serie de herramientas similares que, con un par de tutoriales y algo de tiempo y paciencia, empezarás a controlar sin demasiados problemas.
Tanto Streamlabs como OBS funcionan con un sistema muy ágil que permiten alternar entre distintas escenas con mucha rapidez. Así, con solo un par de clicks podrás alternar entre una escena en la que tú eres el protagonista a otra en la que puedas mostrar el juego que estés emitiendo a pantalla completa. Hay muchísimas opciones y, sólo tienes que buscar la configuración adecuada que se adapte a tu contenido.
Este software detecta con facilidad cualquier entrada de vídeo, audio – para conectar un micrófono, por ejemplo – y cualquier otra cosa que necesites tener disponible durante el streaming.
Disfruta de lo que haces
Una vez que tengas tu equipo y tu programa de emisión preparado, lo único que te falta es empezar a crear un contenido con el que disfrutes de verdad. De nada sirve comprar el mejor equipo si sientes una presión constante por conseguir nuevas visualizaciones y seguidores que no te permite disfrutar de lo que haces.
Conseguir una comunidad de seguidores alrededor de tu contenido es realmente complicado y existe una posibilidad muy alta de que no logres destacar entre la gran marea de creadores de contenido que prueban suerte en estas plataformas. Por eso lo importante es disfrutar independientemente de las estadísticas.