‘Nuestra bandera significa muerte’ (HBO Max) es una creación de David Jenkins, dopada con el talento creativo de otras dos mentes desquiciadas como son las de Taika Waititi y nuestro Nacho Vigalondo (director de dos de los tres capítulos iniciales).
Entre los tres nos regalan una comedia de premisa alocada: la historia de una banda de piratas capitaneada por Stede Bonnet (interpretado por Rhys Darby), un lord inglés que, intentando huir de su vida anodina y de un trauma con su padre violento, decide cumplir su sueño juvenil, huir de todo y lanzarse a los siete mares para encabezar su propia tripulación pirata. Así empieza todo, en medio del caribe corsario, dentro de su barco, y conociendo a su también inútil tripulación.
‘Nuestra bandera significa muerte’ se deja ver y sabe explotar en lo esencial sus virtudes y ventajas, pero también deja la sensación inicial de que desaprovecha mucho de su potencial
La serie alberga, en sus tres capítulos iniciales, tres talentos innegables. Uno: una esforzada verosimilitud temporal y credibilidad histórica (cuando veáis el barco de la armada española, veréis las banderas que llevaban entonces; y el vestuario no está nada mal).
Dos: el esquema de comedia mezcla con habilidad la comedia de situación con las historias “en el trabajo” dónde el barco pirata no deja de ser la oficina de una troupe de personajes tan variopinta como desquiciada.
Un humor demasiado físico
Y tres: el reparto posee nombres sólidos que poco tardan en hacer valer sus habilidades interpretativas para crear personajes memorables y entretenidos. Entre ellos destacan, junto con Rhys Darby, Ewen Bremner (dando vida a Buttons, la mano derecha de Stede Bonnet), Joel Fry (el ridículo saltimbanqui de Frenchie) o Matthew Maher (a un Black Pete obsesionado con su experiencia como tripulación de Barba Negra).
No obstante todos estos talentos y virtudes, la serie los conjuga con un humor que tira demasiado, por lo menos en los tres primeros capítulos que hemos visto, de lo físico; en detrimento de un guion bastante flojo y con chistes demasiado forzados. Los cebos de los chistes que usa también están demasiado trillados: el trauma paterno, la confusión de identidades o el amante-por-la-ventana; son recursos mil veces vistos. Y las veces que se sale de este corsé es para hacer chistes con poca gracia.
Comedia simplona y fácil
Así es que ‘Nuestra bandera significa muerte’ (HBO Max) no deja de ser una comedia simplona y fácil, entretenida gracias a su humor físico y absurdo, amplificado por una dirección talentosa para explotar este recurso, que conseguirá sacarnos sonrisillas esporádicas aquí y allá; pero nunca una buena sonora carcajada. Su guion es mejorable, sus chistes necesitan de nuevos bríos, y lo amplio de su elenco interpretativo hace que los actores con mejor vis cómica se diluyan demasiado en el conjunto.
La serie se deja ver y sabe explotar en lo esencial sus virtudes y ventajas, pero también deja la sensación inicial de que desaprovecha mucho de su potencial con un uso poco inteligente o, simplemente, tirándolo por la borda. Propio de una historia de piratas, pero impropio de una comedia de calidad. Ojalá los capítulos que quedan puedan ayudarles a enderezar el rumbo.
