Los bivalvos tienen la costumbre de adherirse a cualquier objeto sólido que esté sumergido en su área de acción, lo cual supone un problema sistémico para las embarcaciones y en general para cualquier equipo submarino. Pueden obstruir tuberías, dañar equipo científico y a la estructura de las embarcaciones.
Un equipo de científicos ha desarrollado una vía para combatir esta amenaza continua. Se trata de un polímero lubricante que previene que los bivalvos -como por ejemplo los mejillones- se adhieran a superficies sumergidas.
Los bivalvos se adhieren a cualquier superficie sólida que encuentran gracias a una fibra pegajosa que segregan. Este nuevo lubricante repele la materia orgánica, y según los científicos impide que los bivalvos detecten la superficie sólida y se adhieran a ella.
Como puede verse en el vídeo que mostramos, se utilizaron bivalvos asiáticos de la especie Perna viridis, que desplegaron sus apéndices sobre la superficie impregnada de este polímero, sin poder aferrarse a ella. Tras ocho semanas de inmersión de la superficie, las placas recubiertas con el polímero promediaron sólo cuatro bivalvos por centímetro cuadrado, mientras que el grupo de control, sin polímero, promedió unos 118 bivalvos por centímetro cuadrado.
Fuente: Science.