Ilustración de cubierta de "Pentamerón", de Giambattista Basile
Fragmento de la ilustración de cubierta de "Pentamerón" | Fuente: Ediciones Siruela

Sobre el Pentamerón, cuento de los cuentos, se cimenta buena parte de la imaginería de las fábulas más conocidas. Aunque en sí mismo sea un gran desconocido, su legado perdura y forma parte de la cultura popular.

 

Uno de los rasgos diferenciales del catálogo de Ediciones Siruela es el papel que ocupan en él los cuentos populares. De algunos de esos títulos nos hemos ocupado en Fantasymundo, reseñando obras que recopilan tradiciones orales tan distantes como la antillana y la británica.

Toca volver a hacerlo con motivo de la reciente reedición en rústica de Pentamerón. El cuento de los cuentos, una obra del autor napolitano del siglo XVII Giambattista Basile.

Publicada dentro de la colección Las Tres Edades · Biblioteca de Cuentos Populares, cuenta con edición, traducción del italiano y prólogo de César Palma, introducción de Benedetto Croce y epílogo de Italo Calvino.

El título original completo de esta obra es El cuento de los cuentos, o el entretenimiento de los pequeños (Lo cunto de li cunti overo lo trattenemiento de peccerille, en dialecto napolitano, la lengua en la que fue escrito originalmente).
Un título equívoco, pues el lector encontrará en esos cuentos elementos muy probablemente demasiado fuertes para oídos infantiles: lo cruel, lo escatológico, lo malicioso, lo carnal… convive en ellos con lo noble, lo virtuoso, lo ejemplar, lo moral.

 

«Y si os place dar en el blanco de los deseos de mi princesa y satisfacer plenamente los míos, acceded, durante los cuatro o cinco días que aún le restan para descargar la panza, a relatar al día cada una un cuento de aquellos que las viejas suelen contar para regocijo de los más pequeños. Os reuniréis siempre en este lugar, donde primero se comerá y en seguida se dará inicio a las pláticas, para concluir la jornada con una égloga que se encargará de recitar alguno de nuestros criados. Y así transcurriremos alegremente la vida, ¡y pobre del que muere!»

 

Imagen de la cubierta de "Pentamerón. El cuento de los cuentos" de Giambattista Basile
Imagen de la cubierta de «Pentamerón. El cuento de los cuentos» | Fuente: Ediciones Siruela

El libro se estructura en torno a una historia marco, que sirve de hilo conductor a las demás: la de la princesa Zoza, que ve como el engaño de su esclava le arrebata su posición y a su amado príncipe Tadeo.

A la esclava, embarazada, le entran unos irrefrenables deseos de escuchar cuentos. Entonces su esposo reúne a diez de las mejores contadoras de historias del reino. Cada una de ellas habrá de contar un cuento cada día, en los cinco días que le restan para dar a luz.

Así, en cinco días se sumarán cincuenta historias (incluida la germinal de Zoza).
De ahí el título Pentamerón, que significa «cinco días» y sigue el modelo del Decamerón de Bocaccio (en el cual diez narradores contaban en diez días cien hitorias).

Las primeras versiones de las que se tiene constancia de muchos de los cuentos más famosos están entre esas cincuenta historias. Desde Cenicienta hasta El gato con botas. De ahí las tomaron, para elaborar sus propias versiones, autores tan conocidos como Perrault o los hermanos Grimm.
Eso sí, aquí aparecen despojadas de edulcoramientos. Brilla una jovialidad que resulta cruelmente salvaje para un lector actual.

 

«…y dándole a Lucía una jabonadura mucho peor que la que se le puede dar a un asno y tras hacerle confesar con su propia boca la traición, dio al momento orden de que la enterrasen viva y con la cabeza fuera, a fin de que su muerte resultase más penosa»

 

La procedencia de las historias recopiladas y adaptadas en el Pentamerón está en la tradición oral de lugares como Venecia o Creta (una isla que, hasta mediados del siglo XVI, cuando fue conquistada por los otomanos, constituyó un enclave estratégico de los venecianos en el Mediterráneo oriental).

Pero Vasile no trata de ofrecer una transcripción fiel de la tradición oral que recoge, aunque algunos textos conserven rastros de oralidad.
Él apreciaba las hechuras de la literatura de su tiempo, y las emplea con jovial habilidad para narrar los cuentos. Su estilo barroco y alegre, tan cultivado como gamberro, subyace bajo la vitalista materia de las fábulas.

Una observación personal:
El riquísimo despliegue de historias y personajes puede resultar un tanto reiterativo para un lector actual. Y lo barroco del estilo puede llegar a abrumarlo un tanto.
Por eso creo que, aún manteniendo el orden de lectura que marca la estructura de la obra, más importante aquí que en otras compilaciones, es mejor ir espaciando en el tiempo la lectura de los cuentos.

Encuadernado en rústica, con una sencilla cubierta en tonos azules, el libro se maneja con facilidad pese a sus casi quinientas páginas. Unas páginas que, bien maquetadas, se leen con comodidad, pese al tamaño contenido de la fuente y lo compacto de los párrafos.

 

Giambattista Basile, autor de "Pentamerón"
Grabado del autor, Giambattista Basile

Giambattista Basile (1575-1632) fue un poeta y cortesano napolitano, que compuso odas y elegías para los nobles a los que sirvió en diversas cortes.

Su obra más notable fue, sin embargo, el Pentamerón, donde recoge numerosos cuentos de la tradición oral del habla napolitana en un «compendio de lo fabuloso y lo grotesco».

Puedes empezar a leer Pentamerón aquí.

Puedes encontrar Pentamerón aquí.

Fran Sánchez
Lector, conversador, escribidor.«Reading maketh a full man; conference a ready man; and writing an exact man.» (Francis Bacon)