Bienvenidos de nuevo a los paseos en red intertemporales de Miguel O´hara. En esta ocasión de la mano de Panini Cómics tenemos un nuevo tomo 100% Marvel, el cuarto, dedicado a las desventuras de este Spiderman futurista en la época actual como parte de los activos de Empresas Parker. De nuevo sus aventuras corren a cargo de su guionista creador Peter David y en un sorprendente ejercicio de estabilidad editorial, con el dibujante Will Sliney.
Al contrario que en otras aceleradas colecciones Marvel, donde sólo parece que vamos saltando de evento en evento, David va a parte, contándonos historias de corte clásico pero donde siempre mete alguna de las interesantes reflexiones vitales y sociales que le han hecho famoso en títulos como X-Factor o el Increíble Hulk. O´hara es un personaje que como todos los creados por él, David maneja a la perfección, rodeándolo de geniales secundarios y dando un ritmo adecuado a que la historia se desarrolle.
En estos nuevos siete números Miguel va a empezar con un problema un tanto peculiar, y es que Industrias Parker es un conocido hervidero de problemas, por ello si una de sus divisiones se dedica a trastear con niebla terrigena lo más normal es que tengamos una situación inhumana. Rhonda Fleming, la reciente experta en mutaciones de la empresa y pareja de la ultracontroladora Jasmine (Ya sabéis la secretaria que tiene su propia secretaria, la buena de Roberta, la Capitán América de 2099). Pues bien aparte de introducir una serie de chistes que no sé si son divertida creación del traductor español, con el nombre de Rhonda. Lo que tenemos es la aparición de una nueva inhumana, Glorianna, y como nos enseñó Charles Soule en su serie “Inhumano”, cada vez que un nuevo inhumano vaya a aparecer es posible que sufra el juicio de Lash, la enrome masa de músculo desintegradora que sólo deja vivir a los inhumanos cuya terrigenesis, considera digna.
David aprovecha una típica lucha de Miguel contra dos enemigos, para meter ciertas reflexiones muy interesantes sobre lo qué es la religión y la fe, pero tranquilos que gracias al dinámico trazo de Sliney, vamos a tener montones de momentos botas-jet, telaraña explosiva y Miguel diciendo “impactos” cada poco rato mientras salta y se posiciona como nos encantaría que hiciera el resto de los héroes arácnidos.
Resulta la situación nada dorada de Glorianna, Miguel va a descubrir gracias a Jasmine, todo el entramado de ocultación sobre el verdadero estado de Tempest que su madre ha hecho, para ello además Peter David rescata a un olvidado villano, El Hombre Montaña, creado en 1963 para the Amaizing Spiderman 73. Todo un saco de músculos especializado en aplastar arañas para Silverbane y que va a llevar tan al limite personal su batalla con Miguel que va a descubrir que esta araña tiene garras, colmillos y una gran sed de sangre cuando se trata de proteger a los suyos. Ni siquiera la buena de la I.A Lyla puede detener la furia de nuestro enmascarado enamorado.
La estrategia de saga de dos números, muy propia de los setenta le funciona muy bien a David, con ello consigue un ritmo muy de serie de televisión en el que avanzan las relaciones de los personajes, pero la trama de cada aventura queda completamente resuelta, lo que hace que la lectura del tomo sea ágil, fresca y rápida, pues siempre logra dar un gran equilibrio entre los profundos diálogos de desarrollo que siempre han sido una de sus señas de identidad, con una gran cantidad de páginas de acción casi sin texto donde simplemente Sliney pueda recrearse, contando siempre con ese punto de oscuridad y violencia que caracterizaba a este Spiderman desde sus orígenes, lo que hace que las batallas superheroicas de esta serie tengan mucho de super pero pocos momentos tópicos o incluso heroicos.
Pese a lo que hemos dicho sobre las aventuras autoconclusivas lógicamente como toda buena serie, la trama subyacente, en este caso la de la organización de “El Puño”, va cobrando fuerza y va dejando como finales abiertos en cada una de sus intervenciones.
El tramo final del tomo hace que Miguel vuelva a una extraña 2099, totalmente derruida y donde Alchemax es más el fortín de los villanos que dirigen este mundo que la gran macrocorporación que recordamos. Aquí David le va a pedir a Sliney que haga un ejercicio de nostalgia devolviéndonos a la versión 2099 de “los Seis Siniestros” con el mismo aspecto que les diseñó Rick Leonardi. Así que por aquí desfilarán: El Buitre (Cantante e ingeniero frustrado y convertido en criminal aéreo), Venom (ese oscuro hermano de Spiderman 2099 en más de un sentido), La Mujer de Arena (que magnifica reversión acercándola al Sandman de cierta canción popular americana), el Doctor Octopus Atlante (Un pulpo mucho más literal que cualquiera de los otros en portar el nombre), el primer Electro en ser mostrado como un ser completamente de energía y por supuesto el Duende Verde.
Pues bien, os aviso que más allá de lo estético David ha hecho muchos cambios en estos villanos, para representar que son una realidad alternativa, siendo el más inesperado de los mismos hasta un aliado de Miguel. Sliney vuelve a demostrar lo mucho que bebe de las influencias arácnidas y por ello esta saga no desmerece en nada a cualquiera de los enfrentamientos clásicos de Spidey contra las muchas encarnaciones de los Seis Siniestros. Sliney elevado a la enesima potencia para hacer que Miguel no acabe de terminar de derrotar una amenaza cuando ya caiga en los brazos de otra, de nuevo acción palomitera por la que devoramos las páginas saltando de viñeta en viñeta a un ritmo feroz.
Pero no sólo vamos a reecontrarnos con villanos, podremos volver a ver a Gabriel, a Lyla en su versión humana o hasta al ardiente Firelight. David tiene muchas sorpresas preparadas, identidades que no esperas y un gran momento en el que Miguel va a aprender por las malas que si humillas a un villano por no ser lo suficientemente malvado, igual ese villano toma nota de tus “consejos” y los inocentes lo pagan. ¿Cómo qué creéis que esos son todos los homenajes que David ha hecho al futuro que él creó? ¿Qué sería de Spiderman 2099 sin el señor Stone de Alchemax? Pues para saber de su vuelta tendremos que esperar al siguiente tomo donde además Miguel se verá envuelto en medio de la Segunda Guerra Civil Superhéroica.
Spiderman 2099 sigue manteniéndose como la elección clara para todos los amantes de esta bizarra y oscura versión de Spiderman, pero también para todos aquellos que quieran unas historias arácnidas más clásicas que las que Slott está perpetrando en la cabera principal, si Miles Morales es demasiado adolescente y actual para ti no dudes en que Miguel es hoy por hoy el arácnido más entretenido y clásico de todos. Nos leemos de nuevo a las puertas de 2099.
