Tales of Graces f Remastered — Análisis

Tales of Graces f Remastered es un juego remasterizado que incluye más de 80 DLC además de mejoras visuales, nuevas escenas y mejoras de calidad de vida. El título original llegó a Wii en 2009, llegando su revisión f al año siguiente a PS3, expandiendo su historia con un episodio nuevo.

Esto ya lo he jugado antes

Es cierto que los fans de la franquicia Tales of saben lo que se encuentran. Juegos que son tan inmersivos y requieren de tanto tiempo se hacen complejos de rejugar. Uno de los mayores problemas es la de los encuentros con enemigos, haciéndonos perder mucho tiempo de nuestra aventura. Otro de los motivos por los que se nos puede hacer cuesta arriba su rejugabilidad es la imposibilidad de pasar cinemáticas o diálogos. Pues en Tales of Graces f Remastered, así como en cada vez más juegos del género, esto no será un problema.

Además de las mejoras gráficas que esperamos de estos relanzamientos, se ha incluido la posibilidad de saltarse los combates tanto en el mapa como en las mazmorras. Esto nos ahorrará gran parte del tiempo invertido en el juego. También tenemos la posibilidad de saltarnos cinemáticas y diálogos que abultan las horas totales de juego. Otro aspecto muy bien aceptado es el de la posibilidad de disfrutar de un guardado automático, que nos permite tener sesiones más cortas de juego.

Algunas novedades más

Además de mejorar la resolución y la tasa de fotogramas, Tales of Graces f Remastered mejora las texturas de los modelos (ahora más definidos), una mejor definición de los entornos y una adecuación de las animaciones. Otro de los aspectos a tener en cuenta es el poco tiempo que transcurre entre los combates y el escenario, siendo más breves gracias a un menor tiempo de carga.

La entrega original traía consigo un epílogo que agrandaba la experiencia del juego tras su final inicial. Este añadido amplía la historia más allá de su final, añadiendo más horas de juego (bastante más, podría decirse). Recordamos que esto es algo que ya se incluyó en su momento, no es algo novedoso de esta edición remasterizada.

La historia sigue siendo igual de interesante

Sin entrar en demasiados detalles de la historia de Tales of Graces f Remastered, el mundo que habitamos se llama Ephinea. Subdividido en tres reinos diferentes, Windor, Stratha y Fendel, manejaremos a nuestro personaje principal, Asbel Lhant. Como viene siendo marca de la casa en la saga Tales of, la historia empieza de manera simple, justo para tomar en consideración a los personajes. Conforme avanzamos en la historia, el crecimiento de los personajes así como los lazos que los unen se engrandecen, además de sorprendernos con interesantes giros de guion.

El juego diferencia claramente dos etapas en la vida de nuestro personaje: la niñez y la adolescencia. A lo largo de nuestra aventura podremos ver cómo nuestros personajes maduran, tienen crisis y moldean su personalidad según sus acciones y los acontecimientos que viven.

Algunas cosas son imposibles de cambiar

La obra original fue criticada en su momento por un aspecto gráfico bastante decente (como mencionamos al comienzo, originalmente se lanzó en Wii). Otro de los aspectos a tener en cuenta eran los tiempos de carga, algo que hastiaba a los jugadores cada vez que salían de un encuentro. Esto es algo que se ha mejorado, tanto en su versión f como en esta, brindando mejoras en cada una de las revisiones.

Algo de lo que no puede escapar es del uso de una cámara fija, algo que se ha quedado anticuado para los estándares de la época. Esta cámara se ha mantenido, ya que sería un trabajo demasiado arduo para llevarlo a cabo. Otro de los aspectos que continúa de la misma manera es lo vacío que a veces se siente el entorno. Estábamos acostumbrados a que en otras entregas las ciudades estuvieran vivas, repletas de personajes con los que interactuar y cosas por hacer. En esta entrega, y probablemente por las limitaciones del hardware, la sensación de estar solo se hace más presente.

Ahondando en las novedades

Tales of Graces f Remastered nos trae mejoras de calidad de vida, lo que lo hacen bastante atrayente para los jugadores que no lo disfrutaron en su momento (o quienes quieran revisitarlo). Podemos deshabilitar los combates, para jugar sin interrupciones y evitar parones en la jugabilidad. También se ha aumentado la velocidad a la que Asbel camina, mejorando el desplazamiento y acortando el tiempo que pasamos deambulando.

Ahora existen marcadores, pequeños puntos que nos marcan nuestro rumbo e impiden que vaguemos sin rumbo por el mundo. La opción del guardado automático nos ayuda a no tener que estar repitiendo constantemente una zona si nos machacan, aunque ahora podemos repetir un combate específico si nos derrotan. Sin embargo, la posibilidad de abandonar nuestra partida con el autoguardado hace que podamos tener sesiones de juego más casuales, de menor duración, por lo que tenemos otro punto positivo para la accesibilidad.

«Grade shop», o pónmelo más facilito

Una de las novedades que se incluyen en esta remasterización es una especie de tienda en la que podemos elegir qué tipo de mejoras decidimos tener activas. Mayor experiencia por combate, dinero extra, mayor velocidad o duplicar nuestro daño en los ataques son algunos de los parámetros a escoger. Esto es algo totalmente opcional, para aquellos jugadores que deseen tener una experiencia menos ardua, y puedes elegir no utilizarla si deseas una experiencia lo más natural posible.

Conclusión

La reedición de Tales of Graces f Remastered consigue volver a captar la atención sobre los JRPG de culto. Mejorando su rendimiento, adaptando sus posibilidades a los estándares de ahora, consiguen rescatar una entrega secuestrada en Wii y PS3. La inclusión de subtítulos en una buena cantidad de idiomas, entre ellos el español, lo hace más accesible. Puede que no esté considerado como uno de los mejores Tales of, pero sin duda es la mejor manera de disfrutar de Tales of Graces f.