Aunque las aventuras gráficas no son el género más popular hoy en día dentro del mundo videojueguil, es innegable que seguimos recibiendo grandes títulos de este género cuya época dorada tuvo lugar en los tiempos en los que disfrutamos de Monkey Island y Day of the Tentacle. Hoy día, muchos estudios han reconducido el género a una vertiente más cinematográfica, como Telltale Games (Walking Dead, Wolf among Us) o Quantic Dream (Heavy Rain, Beyond: Dos Almas) creando aventuras muy interesantes y emocionantes, y manteniendo así el género muy vivo. No puedo dejar sin comentar The Last Door; un ejemplo de aventura gráfica made in Spain del estudio The Game Kitchen, llena de intriga, misterio y algo de terror ambientado en una Inglaterra victoriana que os recomiendo encarecidamente.
Continuando con productos nacionales tenemos aquí mismo a The Sexy Brutale, que ha sido creado en conjunto por Cavalier Game Studios y Tequila Works, padres de Deadlight o del reciente Rime. The Sexy Brutale nos sitúa en una extraña mansión-casino a la que hemos sido invitados junto a algunos viejos conocidos. Uno a uno, todos los invitados serán asesinados y al llegar la medianoche sangre lloverá del cielo y todo llegará a su fin. ¿Cómo evitamos todo este desastre?
Aquí es donde entra Lafcadio Boone, el invitado que encarnamos con el deber de evitar estas muertes. Esta hazaña la podremos conseguir gracias a un reloj que posee el poder de viajar atrás en el tiempo. Pero ojo, no podremos volver atrás unos minutos antes de la muerte, sino que reiniciaremos el día completo (un día equivale a unos 10 minutos reales). Es por ello que será vital seguir todos los movimientos de los personajes para conocer sus acciones y la causa de sus muertes para evitarlo. Un auténtico día de la marmota en el que los personajes harán día tras día las mismas acciones y morirán de la misma manera, lo que también recuerda enormemente al gran Majora’s Mask de la saga Zelda.
Por si no fuera suficientemente complicado, no podremos interactuar directamente con los personajes, ni dejar que nos vean, ya que solo debemos alterar los hechos de manera indirecta. Habrá que espiar por las cerraduras de las puertas o escuchar las conversaciones de las habitaciones contiguas para entender lo que ocurre y así conseguir evitarlo. Por ejemplo, si alguien va a recibir un disparo a manos de un enemigo, podemos sustituir la bala del arma por una de fogueo cuando nadie se percate antes de que el asesino la coja y de esta forma evitaremos una muerte segura. Si coincidimos dentro de la misma sala con un personaje, el tiempo se parará y nuestra vida comenzará a bajar rápidamente por causa de crear una suerte de paradoja temporal.
Aunque la mansión es bastante grande y en principio parece que podemos explorarla al completo, lo cierto es que el juego nos limita las zonas accesibles por cerraduras o puertas «mágicas» que solo podremos desbloquear conforme salvemos a los invitados. Esto se debe a que cada asesinato se localiza en una zona concreta de la mansión, de modo que la investigación que deberemos realizar estará siempre limitada dentro de un radio, haciéndolo así mucho más sencillo que si tuviéramos que investigar por toda la mansión.
Conforme avancemos en la trama, descubriremos que cada invitado posee un poder especial. Por ejemplo, Trinity Carrington tiene un oído súper agudizado, mientras que Greyson Grayson puede abrir cualquier cerradura. Al salvarlos de una muerte segura, adquiriremos sus máscaras y con ello su habilidad, la cual nos permitirá seguir investigando zonas nuevas de la mansión.
La curva de dificultad para salvar a estos invitados irá en aumento progresivo, con ciertos altibajos, pero en general sin llegar a ser un reto extremadamente complejo. Necesitaremos investigar bien, observar el entorno y saber usar con cabeza las habilidades adquiridas para ir salvando a cada uno de las víctimas, y con ello ir desentramando el misterio que rodea toda la mansión.
En líneas generales podríamos criticar que el juego pretende ser tan misterioso que se echa en falta más información sobre el argumento, como por qué han sido invitados los personajes o quiénes son, aunque por suerte esto es algo que se explica en los documentos de texto que iremos desbloqueando conforme jugamos. Aún así es una historia amena y muy interesante, en la que por supuesto nos toparemos con algún que otro giro argumental sorprendente.
A parte de salvar a los invitados y desenmascarar al artífice de los asesinatos, encontraremos a lo largo de la historia algunos ítems y coleccionables que nos revelarán más información sobre los personajes y su trasfondo, así como la historia de la mansión e incluso un final alternativo secreto. Todo el juego nos llevará aproximadamente unas ocho horas de juego, aunque eso dependerá de nuestra pericia resolviendo sus acertijos.
Estéticamente The Sexy Brutale destaca gracias un estilo cartoon aderezado con ese toque glamour de los casinos, que sienta muy bien a la ambientación de misterio y asesinato de la historia. Cabe destacar unos decorados muy cuidados en cada zona de la mansión, presentando un estilo muy característico para cada zona de la misma.
Por otro lado, el sonido también ha sido tratado con mimo, no solo por una fantástica banda sonora que se adecua perfectamente a cada situación, sino por unos efectos sonoros que serán clave para saber lo que está ocurriendo en cada momento en la mansión-casino.
Lo dicho: The Sexy Brutale es otro gran ejemplo de aventura gráfica, y sabiendo que es un producto nacional, estamos doblemente de enhorabuena. Aunque no está falto de pequeñas carencias, como la falta de algo más de información en algunos puntos o algo más de complejidad a la hora de resolver ciertos asesinatos, al final resulta un título donde la combinación de misterio, investigación y sorpresas, junto con el genial apartado técnico, consigue crear una fantástica experiencia en la que no pararemos hasta conseguir desentrañar todos sus misterios.