El pasado mes de septiembre Norma Editorial publicaba el primer tomo de “Under ninja”, el nuevo manga de Kengo Hanazawa, mangaka de “I am a hero”. Con su estilo habitual, el autor actualiza la figura del ninja, retorciéndola para adaptarla a una sociedad y unos personajes decadentes.
El ninja nini
La historia arranca con una unidad del ejército de EE.UU. en plena operación para detener a un terrorista. No obstante, se lo encuentran con media cabeza decapitada, así como el dedo con el que iba a pulsar el detonador de una bomba. En la escena del “crimen”, hallan también una katana. ¿Podría ser obra de un ninja? Pero estos guerreros hace siglos que desaparecieron… ¿o quizá no?
El siguiente capítulo nos lleva hacia el apartamento de Kumogakure, un joven nini que se dedica a ver la vida pasar mientras le roba cosas de la nevera a su vecino. Hasta que cierto día recibe un paquete con equipamiento ninja y una misión que deberá averiguar por sí mismo cómo cumplir. Y es que Kumogakure es, efectivamente, un shinobi. Estos han sobrevivido ocultos en la sociedad, de modo que el nini del apartamento de al lado, el repartidor de paquetería o el funcionario de turno bien pueden ser uno de ellos.
Y mientras Kumogakure trata de llevar a cabo su nueva misión después de un tiempo sin pegar palo al agua, un misterioso extranjero que quiere ser un ninja a todo meter hace su aparición, y se dedica a realizar tareas más que peculiares para acceder a la organización…
Gamberra actualización de la figura del shinobi
“Under ninja” da una vuelta de 180º a la idea que la gran mayoría de las obras nos han transmitido de los ninjas. En una obra con espíritu de thriller, estos guerreros se actualizan con nuevas armas y equipamiento, conflictos jerárquicos, organizaciones secretas… todo ello combinado con una trama y unos personajes que pasan de lo absurdo.
El manga gira en torno al humor más surrealista y gamberro, de tal modo que te pasas la obra entera con una sonrisa sarcástica en la cara y sin esperarte el esperpento que aparecerá a continuación. Y es que algunas situaciones pasan de lo absurdo a lo grotesco, con imágenes que no resultarán del agrado de todo el mundo.
De la trama apenas se intuye el toque de thriller, con sus diversas organizaciones criminales y los ninja que intentan contrarrestarlas, puesto que este primer tomo se centra más en presentar a los personajes.
Y qué personajes. Kengo Hanazawa vuelve a colocarnos ante un protagonista antiheroico, que roza el patetismo tanto o más que los secundarios que se esbozan en esta primera aproximación. Por un lado, una treintañera dada al alcohol, un viejo loco que ofrece “leche materna” a los niños del parque o el extranjero con complejo de ninja.
Individuos que transmiten el derrotismo de una sociedad decadente, pasado este por el filtro de un humor cínico y en ocasiones un poco desagradable.
Hiperrealismo al límite
Todo ello recreado con un dibujo de estilo hiperrealista, con fondos dibujados a partir de fotografías sobre los que se mueven unos personajes expresivos dentro del estilo característico del autor. Hanazawa también aporta ese realismo a situaciones cotidianas que representa con todo lujo de detalles, sin cortarse en mostrar desnudos o escenas gore.
Cabe resaltar la adaptación de los ninja a la época actual, con equipamiento de camuflaje que asemeja a una sencilla sudadera y armas más tecnológicas.
En cuanto a la narrativa, el mangaka usa mucho el recurso del cambio de perspectiva para dar sensación de movimiento, así como viñetas bastante amplias, con un resultado que atrapa la vista del lector.
En definitiva, “Under ninja” se presenta como un seinen que actualiza la figura del shinobi a través del prisma del humor absurdo. Dotada del espíritu del thriller de espías y con un estilo hiperrealista, la historia promete acción, cinismo y la característica perspectiva que Kengo Hanazawa aporta a todas sus obras. Actualmente cuenta con cuatro tomos recopilatorios en Japón.
Si eres fan del mangaka, no lo dudes, su nuevo manga no te defraudará.
